FECEBOOK (23 y 24 de febrero )

Se fija uno en las fotos que ilustran las noticias, porque uno cree que han de añadir información o, por lo menos, sorprender. Lee uno una noticia que resume las quejas de la asociación Plena Inclusión, que trabaja por la eliminación de barreras de todo tipo que sufren las personas con alguna discapacidad intelectual. Dieron ideas al Principado sobre proyectos para la captación de fondos comunitarios, pero de momento recibieron la callada por respuesta. Uno da vueltas a la foto de la noticia, la presidenta de la asociación, Casilda Sabín, sentada en un enorme morrillo de los que rodean a la fuente de la Foncalada. ¿Qué debemos entender? ¿Que el Gobierno del Principado sigue tranquilamente sentado como ella? ¿Que está esperando por si sale algún chorro de dinero por el furacu del fondo? ¿Que sale poco pero está todo un tanto turbio? A lo mejor simplemente se busca que hablen de uno. En cierta medida lo consiguieron ella y el fotógrafo (o fotógrafa, que se omite extrañamente).

Hablando de proyectos, dice LNE que el País Vasco busca tomar ventaja en la petición de fondos europeos y anuncia el envío de 188 proyectos, con lo que la asturianía entra en pánico. Uno cree que los fondos no se repartirán por orden de llegada, sino que, una vez que se reciban los de todas las Comunidades dentro de plazo establecido, se valorarán los más adecuados, hayan llegado los primeros o los últimos. Ahora bien, los que corren meten prisa a los otros, que pueden presentarlos cojos y con riesgo de tropezar ante el primer filtro y quedar fuera.

LNE entrevista a la Viceconsejera de Turismo de Asturias. Declaraciones rutinarias y consabidas. En el repaso de cuestiones le preguntan por Covadonga. Declara entre otras obviedades conocidas que cuenta "con un sistema específico para modular el impacto del tráfico a los Lagos". La abogada Avilesina Paula Tamargo ideó unos dibujos para que a los niños que tengan declarar en los juzgados no les entre el miedo escénico ni se les descontrolen los esfínteres. El resultado es un cómic de 12 páginas y está protagonizado por dos niños y ambientado en los juzgados de Avilés, en el que se resume lo que ocurre cuando un niño acude a la exploración del menor, una prueba en la que se trata de valorar la relación de los pequeños con sus progenitores antes de decidir sobre su custodia". Modulación, exploración, dos palabras que a uno le revientan. En el caso de la exploración está así recogido en las leyes: a los niños no se les interroga, se les explora. Pese a su encaje legal, es una cursilada que uno no soporta, como tampoco cuando oye a alguien hablar de modular.

Tan malo ye nun llegar como en llegando pasase. Las familias de infectados que cogieron el covid en el hospital de Jarrio se quejan de que se les permitían visitas muy largas, con permanencias excesivas de miembros de varias familias en habitaciones de reducido tamaño. No aprendemos. Nos dan un dedo y cogemos la mano. Además, no nos conformamos con ir de uno en uno a ver al familiar o al conocido enfermo sino que tenemos que ir como los aceitunados, toda la familia en tropel para amortizar el viaje. Si la queja tiene fundamento, uno cree que es una dejación de funciones del hospital, por extraño que sea hoy limitar las visitas, pero uno tampoco añora aquellos tiempos de las tarjetas de acceso.

En La Vanguardia lee uno una entrevista a Francesc Tusquets, President de la Acadèmia de Jurisprudència y Legislació, que declara: "Falta cultura jurídica, la gente opina sin saber". Como anécdota cuenta que una de las nuevas académicas le comentó: "menos mal, al menos podré hablar de derecho con alguien que sabe". En realidad, si uno tuviera que saber algo con propiedad, estaría callado las más de las veces. Acto seguido se aventura uno con una opinión imprudente y es en relación con una noticia de LNE: "Una mujer con esquizofrenia recupera la herencia que su padre le quitó por vejarlo. El tribunal afirma que todas las amenazas, malos tratos psicológicos y el desearle la muerte fueron 'actos involuntarios' fruto de la enfermedad". Uno cree que hay que distinguir un caso penal de un caso civil. En el caso penal se ventila la responsabilidad del acusado (del esquizofrénico) y está dentro de la lógica moderna que quede exento de responsabilidad penal y que no tenga que ir a la cárcel, a una mala, sino ser ingresado en una institución. Sin embargo, aquí se trata de una cuestión civil, y en este caso el padre no tuvo por qué sufrir las consecuencias de los brotes de esquizofrenia del hijo, padre que lo habrá pasado tan mal que llegó a la desheredación. Como dice el catalán, está opinando uno imprudentemente y de oídas.

Lee uno que una niña de tres años consiguió llegar hasta la manilla de la puerta, abrirla y escapar a la calle a las siete de la mañana mientras sus padres dormían el carnaval de la noche anterior. En estos casos a uno le llama la atención que a los padres (salvo que estén separados) no les pasará nada, pero si le llega a escaparse a una cuidadora (o cuidador), no le libraba nadie de vérselas con el fiscal.

Del 23-F El País rescata la foto de uno de los guardias civiles asaltantes. Cuenta que dejó el Cuerpo y trabajó en Sintel gracias al ministro Rosón y que en una ocasión realizaron una visita al Congreso junto con el resto de compañeros de la empresa y no dijo que estuvo entre los asaltantes, ni ellos se enteraron. Uno no sabe si habría podido guardar el secreto.

Lee uno sendas noticias demográficas sobre el futuro del profesorado, un tanto contradictorias. Por una parte El País señala que la gran caída de alumnos ya está cambiando la escuela, que la enseñanza obligatoria habrá perdido uno de cada cuatro alumnos en veinte años y que los expertos temen cierres de colegios. LNE aporta otro matiz: Secundaria se enfrenta a la jubilación de toda una generación ya que en diez años se habrán retirado la mitad de los profesores.

En La Vanguardia lee uno que Virginia es el primer estado del sur en abolir la pena capital. Virginia, cuya capital Richmond, lo fue de la Confederación esclavista sureña. Desde España se ve a los Estados Unidos como un país monolítico con su única bandera, pero resulta que en cuestiones tan sustanciales como esta muestran discrepancias inconcebibles con nuestra idea de Nación, o de Estado.

Pere Vilanova, también en La Vanguardia, publica un artículo del que uno destaca una frase que pese a ser elemental parece que hay que repetir machaconamente so pena de odiosos malentendidos: el apoyo a las fuerzas de seguridad no hay que dejarlo solo en manos de la derecha y la extrema derecha.

Todos los periódicos nacionales dan por hecho que Israel implantará algún tipo de carnet de vacunación, por ejemplo, un carnet digital para acceder a gimnasios, hoteles y espectáculos. La Vanguardia concreta que todos los estados quieren estandarizar un pase, pero que plantea dudas éticas por posible discriminación a los no vacunados. Añade que Suecia y Dinamarca están avanzando en el mismo sentido. La Razón incide en la eficacia de la vacuna en Israel. Al final, se impondrá la evidencia de los hechos y algún papel habrá. Ya se buscará ex post el argumento justificador.

***

Como recuerdo personal, la tarde del 23-F estaba uno en la Facultad de Derecho, donde a las seis de la tarde comenzaban las clases nocturnas. No hubo tales. Apareció por el patio Jaime Montalvo Correa, entonces catedrático de Derecho del Trabajo que había intervenido por el PSOE en el Estatuto de Autonomía de Asturias y más tarde fue Presidente del Consejo Económico y Social. En un pequeño corrillo anunció que las clases se suspendían. La gente había oído la radio y la afluencia era escasa. Uno tomó un café con dos o tres compañeros en la cafetería Ronda, en el edificio de La Jirafa y acto seguido cogió un tren para Pola de Lena, donde vivía. En la cartera tenía el carnet de la UGT. A través de las ventanillas del tren se veían policías en el andén y a uno le entraron ganas de ir al servicio. Por la noche dormiría algo porque a las cinco de la mañana sonaba el despertador para coger un tren a las cinco y media camino de Lugo de Llanera. Por José María García se fue uno enterando de que el golpe estaba a punto de fracasar. 

Sigue leyendo uno artículos en varios medios sobre el 23-F. En el ABC detecta una línea argumental común: el rey Juan Carlos paró el golpe. Otros medios no enfatizan tanto esa labor. Sus andanzas de los últimos años hace que se reinterprete su actuación, porque revisar es difícil si no hay nuevos datos. A los nuevos datos alude sabiamente Javier Cercas en El País. Señala Cercas que curiosamente el mérito de la llegada de la democracia, más allá del 23-F, estriba en los tres hombres que no se tiraron al suelo, pero no por este hecho, sino por haber resistido los embates internos y las acusaciones de traición de los suyos: Suarez y los falangistas, Carrillo y los comunistas, Gutiérrez Mellado y los militares. Original paralelismo establece también Cercas con las teorías de la conspiración de la izquierda en relación con el 23-F (intentando implicar al rey) y la derecha en relación con el 11-M (intentando implicar a ETA). 

Pasado el tiempo se olvida uno de las penas impuestas y sus peripecias. A los tres más significados intervinientes se les condenó a treinta años. Tejero penó catorce años, Milans del Bosch ocho, y Armada siete después de lograr el indulto, entre otros motivos, por su salud. Murió quince años después. 

Lee uno esto de la determinación de género, que tan distante le cae, ¡pero hay tantas cosas que le chocaron y hoy las asume con normalidad! Ve las fotos de es@s chic@s y le gustaría saber cómo serán de mayores, dicho sea con sana e ingenua expectación. Por cierto, en Bélgica una ley similar a la que se pretende aprobar en España está vigente desde el año 2013, pero no oyó uno nada, ni a favor ni en contra de cómo se está asimilando la situación después de esa experiencia de varios años. 

Cuenta LNE el caso de un edificio de Oviedo cuyo ascensor fue clausurado judicialmente y todo partió de un informe equivocado de un técnico hace seis años. Se pinta la decisión judicial como absurda. Uno sospecha que no se dice toda la verdad, pero la justicia debería salir al paso y exponer lo que hay, no vayamos a penar los ciudadanos que sus decisiones son arbitrarias. 

Absurda parece la noticia de que se publicó en el BOE un anuncio de la Delegación del Gobierno en Asturias por el que se somete a información pública la solicitud de autorización administrativa previa y de evaluación ambiental de tres parques eólicos en Carola, Chagüetos y la braña de Gobia, en los concejos de Somiedo, Tineo y Cangas del Narcea. Sale al paso el alcalde de Somiedo anunciando que no se construirán tales parques porque están en contra todas las administraciones afectadas: la local, la autonómica y la nacional. Y porque es ilegal. Y que si se publica es porque es un trámite obligado si alguna empresa autorizada lo insta. A uno le parece absurdo que ni siquiera se dé trámite a algo ilegal. Como en otras ocasiones, uno sospecha que hay algo más, que se publicará mañana o en días sucesivos. ¿Era tan urgente la noticia que no puede esperar a recabar las informaciones de todas las partes? Esto lleva los ciudadanos al desconcierto porque una cosa es ir publicando noticias que se van produciendo y otra ir publicando de lo que se va averiguando.

Pedro de Silva se anticipa con humor a escribir un capítulo de la historia del Madrid de Ayuso. 

Las fases sanitarias más restrictivas en las que pueden encontrarse los concejos asturianos son la 4, la 4 Plus y la 4 Plus reforzada, que es la más restrictiva. ¿Por que no fases 5 y 6 en vez de esos pluses? Oviedo pasará de la 4 Plus a la 4 y los epidemiólogos advierten de que una rápida desescalada puede traer una cuarta ola. Uno cree que no hace falta preguntar nada a los epidemiólogos: ya se sabe lo que van a decir, es más, aunque no se les pregunte y se ponga en boca de ellos sus declaraciones previsibles, seguro que no se molestan.

Hay algo de controversia con las restricciones en la actividad de los guías de montaña por culpa de la pandemia. En este contexto, el presidente de la Federación Asturiana de Montañismo publica un artículo en el que desliza que históricamente la única escuela habilitada era la de Benasque en Huesca, que expedía títulos con validez para todo el territorio nacional. Es posible que al haber aumentado la actividad montañera la escuela de Benasque se haya quedado pequeña, pero una escuela en cada autonomía...

Se va centrando uno en lo de Hasél, que no va a la cárcel exclusivamente por sus versos libres sino por repetidas agresiones físicas que, además, contaron como antecedentes. La tónica general es que por cosas que salen de la boca no se debe ir a la cárcel, salvo que por la boca emanen incitaciones racistas (y de violencia de género, supone uno). También cree uno que la difusión judicial de su caso aumentó el conocimiento de unas frases que nunca se hubieran sabido de no mediar juicio y condena. Igualmente, uno cree que los altercados callejeros poco tienen que ver con la libertad de expresión. En resumen, entra uno en el redil y va asumiendo la tesis de que por la palabra no se debe ir a la cárcel, con la consecuencia de que los ricos tendrán más libertad para insultar porque ¿qué más les da una condena monetaria?.

Lee uno que el Tribunal Supremo da la puntilla al sistema que usa el Fisco para valorar inmuebles en Asturias. Una sentencia reitera que el perito de la Administración debe visitar los bienes para poder calcular el impuesto de sucesiones y transmisiones. El ciudadano recibe con alborozo los palos que le dan a la Hacienda Pública, a la vez que pide nuevas carreteras y que rebacheen las existentes. A lo mejor la alegría dura poco si esos peritos que ahora visitan in situ los inmuebles (y demás bienes, supone uno) los tasan por encima del valor que tendrían con la aplicación de coeficientes u otros sistemas indirectos. O se crea una tasa de inspección para pagar a esta nueva plantilla de funcionarios. A veces las sentencias las carga el diablo. 

Lee uno que las pymes de la región ingresan al año más de cinco millones de euros exportando con Amazon. No discute uno ni la noticia ni la cantidad, sino el hecho de que se pueda saber que son cinco millones y no ocho, para lo cual necesariamente tienen que destinarse un montón de trabajadores a aportar datos desglosados por colores y tamaños para que debidamente procesados, las chocolateras emitan estadísticas sin cuento. Hoy uno realizó unas gestiones en el inmenso Calatrava, donde se encuentran las Consejerías cultas, pasó por los juzgados de Llamaquique, atravesó por una Plaza de España plagada de oficinas para llegar al Milán a un edificio administrativo de Humanidades. Pensó uno en los cientos de funcionarios que habría en todos esos edificios elaborando estadísticas, para al final sacar conclusiones al dente.

Lee uno que el Museo del Bellas Artes de Oviedo expone dos grandes obras de Villabrille, escultor barroco de Pesoz. Las piezas, de madera policromada, representan a San Agustín y a Santa Rita y han sido cedidas por el Museo Nacional de Escultura. Se pregunta uno si, siendo de Pesoz o su contorno, se puede no ser barroco. 

Ve uno una foto de Fernando Simón, ahora con el pelo corto, ¿pero alguien escucha a Fernando Simón?