No tienes el gusto de conocer personalmente a Javier Morán, periodista de La Nueva España pero es de esos periodistas que merece la pena leer de cualquier cosa que escriban porque sabes que están documentados o que se van a documentar. Alguna vez tienes pillado un desliz, pero incluso en ese caso, es fácil que al día siguiente publique un complemento aunque no lo llame “rectificación”, porque ¿quién reconoce públicamente que metió la pata?
Le sigues la pista de cualquier cosa que escribe, pero en lo que es un maestro es en materia ferroviaria y en materia religiosa, que ya es casualidad que sean dos áreas que te afectan de cerca.
Además de una prosa clara, son numerosas las aclaraciones precisas que incluye entre paréntesis y guiones.
Ejemplos:
“El tren Talgo 250 –o Alvia, según nombre comercial de Renfe, y “patito”, para los aficionados ferroviarios- ha ganado velocidad…”
“Por otra parte, los desvíos de vía -paso por agujas a una vía secundaria- no siempre permiten…”
“La velocidad de un tren depende, al menos de tres factores: la potencia de las locomotoras, la velocidad de la línea –la que permite el trazado y características de la vía-, y los sistemas de señalización”.
“Para circular a más de 200 km/h, el Talgo 250 debería tener activado –instalado ya está, en vía y cabinas- el sistema ERTMS, el que se utiliza en toda la red europea de Alta Velocidad. Sin embargo, el patito utiliza el sistema ASFA (Anuncio de Señales y Frenado Automático). Ambos sistemas transmiten, mediante balizas en la vía, señales a la cabina de conducción. Con velocidades altas, la transmisión de dichas señales necesita del dispositivo ERTMS, el que sí es utilizado por los Talgo 350, los AVE que circulan entre Madrid y Valladolid, y a los que los aficionados llaman pato, a diferencia de su hermano menor”.
“El Alvia en el que viajó La Nueva España sufrió limitaciones por las obras en la línea, los cambios de vía, el paso por estaciones sin parada, la aproximación a estaciones con parada, el hecho de atravesar ciertos pasos a nivel, el radio de algunas curvas y el alcance de trenes más lentos, los cercanías, concretamente”.
Y numerosos ejemplos más.
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008110200_42_691988__Asturias-patito-lento
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008110200_42_691990__Asturias-Salir-Asturias-lleva-tiempo-entrar-linea-tambien
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008110200_42_691991__Asturias-presencia-ganado-provoca-numerosos-parones-Pajares
Y en el mismo periódico del domingo, un reportaje sobre Juan XXIII a ojos de los asturianos, con el mismo rigor.
http://www.lne.es/secciones/noticia.jsp?pRef=2008110200_46_692016__Sociedad-y-Cultura-Juan-XXIII-ojos-asturianos
Y, sin embargo, no ves que LA NUEVA ESPAÑA lo incluya ni entre los subdirectores, ni entre los redactores jefes, ni entre los jefes de sección, ni al frente de área alguna. Mejor, que siga escribiendo.
Pero...país.
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