Te pilla el comienzo del debate sobre el estado de la Nación camino de Benidorm. Mientras escribes esto, oyes desde la terraza con el chunda chunda de la ocasión"Qué-chem-po-tan-feliz". Sí, qué tiempos aquellos en los que, cuando se instauró el Debate sobre el estado de la Nación lo seguías casi tomando notas, estudiabas la prensa del día siguiente y hasta, llegado el caso, bajabas de la web del Congreso el debate íntegro. El voto sigue valiendo lo mismo.
Ojeaste EL MUNDO, que incluye hasta un minutaje sobre cuánto tiempo dedicaron a hablar de cada asunto el Presidente del Gobierno y el líder de la oposición, y cómo fue el reparto del tiempo en otros debates anteriores. Ya otros hicieron los análisis más sesudos, que no por más sesudos más concordantes, así que tú te permites dar tu opinión al sabor de la boca.
Es una opinión a salto de mata porque desde el coche a esa velocidad a la que se circula para burlar las recetas de Tráfico y con el desplazamiento por las anchas Castillas, no siempre se coge bien alguna emisora. Aunque se cogiera resultaría demasiado pesado seguir todo el debate, no vayas también a desconcentrarte en la conducción.
Ves a Zapatero muy duro con Rajoy y a Rajoy igual de duro con Zapatero y en eso resumes su debate, como los de todos los años con todos los presidentes y todos los líderes de la oposición, sólo que el último siempre nos parece más barriobajero y descalificador. Ves a los nacionalistas también muy duros con Zapatero, pero Zapatero les responde zalamero, puede necesitar de ellos. También comprensivo con los sindicatos, pese a la anunciada huelga general. Son muchos votos, y no lo dices en sentido peyorativo porque la democracia es eso. Con los más alejados ideológicamente o quizá de aquellos que no va a necesitar, cortesías las mínimas. Como parte del debate lo sigues ya desde la habitación, medio dormido, boca abajo y mayáu del calor, oyes a uno del PNV, dirías que es Anasagasti, al menos es la voz de Anasagasti, ¿pero no lo había dejado? Hay que desperezarse y ponerse boca arriba para conocer a Erkoreka por los subtítulos, con quiebros contínuos hacia Cataluña. Hasta le encuentras un parecido con Duran i Lleida. ¿Sigue Llamazares o ahora es Cayo Lara? ¿Como es la cara de Cayo Lara?
Por lo demás, reiteradas vueltas de todos a la sentencia del Tribunal Constitucional, que habrá que leer aunque resulta un poco indigesta para las vacaciones, la nación en su acepción jurídica y en su acepción política y otras disquisiciones sobre las fuentes del Derecho.
¿Quién ganó?
No lo sabes pero Zapatero se defendió como gato panza arriba. Y eso que estaba más solo que la una, pero con unos millones de votos detrás.
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1 comentario:
no sé a ciencia cierta quién ganó, pero la "nación" no, desde luego, con un presidente poco creíble y un más que obtuso lider (?) de la oposición que no asiste a la segunda jornada del debate sobre el estado de la nación porque tenía que "adelantar trabajo"
Que ganas tengo de que lleguen las elecciones para poder "votar" y "botar"
Juvenal
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