Lees un reportaje sobre Chad, en donde se están empezando a extraer una cantidad de barriles de petróleo nada despreciable. En principio te parece que aunque las empresas, la tecnología y una buena parte de la mano de obra sean extranjeras, algo les tendrá que tocar a los nativos.
Te enteras por ese reportaje que existe una llamada paradoja de la abundancia o maldición de los recursos y que los países africanos tienen motivos sobrados para temer a sus riquezas como si fueran la peste, porque tenerlas significa guerra, soldados, violaciones de los derechos humanos, desplazamientos, destrucción de la vida civil y del medio ambiente, corrupción...
Meditas y te dices que debe ser verdad, pero que seguramente en esos países antes del petróleo habría también otras guerras, otros soldados, otras violaciones de los derechos humanos, quizá no tanto destrucción del medio ambiente.
Parafraseando a Lenin ¿Qué hacer? Las empresas petrolíferas suelen ser multinacionales privadas con más intereses que corazón. Seguramente a accionistas individuales les adornará algún buen sentimiento, pero el respeto a los derechos humanos sale caro a corto plazo y pudiendo tirar de largo no se paran en barras ¿quién piensa en la inversión a largo plazo que es la justicia y el respeto a los derechos humanos?
A las empresas, a los departamentos de márketing, se les llena la boca con la sostenibilidad, con la responsabilidad social porque patrocinan a un equipo de discapacitados blancos en el primer mundo mientras generan miles de muertos o de discapacitados negros a unas pocas horas de vuelo, pero ningún mercado bursátil penaliza esos desmanes.
5 comentarios:
Es evidente que a las empresas, petroleras en este caso, les importa NADA si los nativos reciben la parte proporcional correspondiente de la riqueza de su territorio, o si gozan de los derechos humanos que serían de justicia.
Conozco de cerca, por circunstancias que no vienen al caso, la situación de Guinea Ecuatorial. Parece que petroleras americanas extraen diariamente barriles de petróleo suficientes para que toda la población guineana viviera dignamente. Con las infraestructuras de las que el país carece, una sanidad y educación que a todos alcanzase, empleo para todos...en fin: podría ser un paraíso para sus habitantes.
Y el paraíso lo es para Obiang y su tribu. Las petroleras,americanas por cierto, encantadas con el dictador. Les sale más barato que si tuvieran que pagar el petróleo para que la población disfrutase de sus derechos.Obiang, ni que decir. Recibe lo suficiente para llevar un lujo de vida.Y digo yo:
1.¿No le preocupa al vigía de Occidente que en Guinea gobierne quién lo hace?
2.¿Es que USA, a la hora de enarbolar la bandera de la libertad, establecerá categorías distintas en función de la tipología de los dictadores?
3.¿O será simplemente que mientras les dejen hacer lo que les sale de los cataplines y obtener los beneficios que pretenden les importa un huevo lo que la población soporte o sufra?
Me da que va a ser la tercera...
Karen: quizás no haya que mirar tan lejos pues hace poco fueron Moratinos y Fraga allí para una celebración de la independencia, lo que se transforma en un respaldo al régimen de Obiang. ¿Hay tantos intereses españoles allí para que cada vez que viene lo tratemos a cuerpo de rey? ¿No seremos tan hipócritas como los EEUU?
¿Dios o el dinero?¿democracia o dinero? Derechos Humanos o dinero?...y así eternamente el dinero gobierna en todos y cada uno de los rincones del planeta y ya se sabe éste, el dinero, no razona, no siente sólo actúa en función del beneficio económico.
¿Qué hacer? esto me lo pregunto yo misma, Lenin afortunadamente ya no está.
Completamente de acuerdo con lo que planteas GPA.
Cada vez que un mandatario o representante del Estado español visita la zona para darle palmaditas a Obiang me rechinan hasta las suelas de los zapatos.
Y claro que la hipocresía es moneda común a todo Estado que tenga o pretenda obtener algún beneficio de algún país, relegando entonces a un segundo plano el régimen político allí instaurado.
Si hacía referencia a USA, es porque desde EE.UU. no tienen inconveniente alguno en montar un conflicto bélico de envergadura en unas tierras (no digo yo que lo monten, quede claro) o montar un embargo a otras, con la excusa de desterrar un régimen dictatorial cuando todos sabemos que los auténticos intereses son otros.
Y porque además, en Guinea Ec., las petroleras que explotan el bruto son norteamericanas y en este caso no le hacen asquitos al régimen.
En lo que se refiere a "los nuestros" (Moratinos y el gobierno en definitiva),no descarto para nada que el petróleo sea una de las golosinas por las que no tienen inconveniente en respaldar sin reparos ni vergüenza a Teodoro Obiang.
P.D.Disculpad la extensión.Hablo demasiado.
¡Y encantada de saludarte, GPA!
Hola, Bely! Fuiste más rápida y publicaste antes. No estabas cuando empecé a escribir.
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