2019/01/15

FARMACIA

Hace unos días acudiste a la farmacia de Campomanes, en el concejo de Lena, donde te gusta hacerte con la lista de medicinas a las que tu madre está acostumbrada, tanto al contenido como a los envases y sus presentación.

Delante de ti estaban atendiendo a un señor y mientras la joven farmacéutica le despachó dos o tres cajas, comenzó a explicarle las dosis y la forma correcta de consumirlos.

- Soy el médico de guardia.
- Perdón, no le conocía.

Intercambiaron algunas breves frases aptas para la ocasión y llegó la hora de pagar.

- ¿Cuánto es?
- Nada, estos están exentos.
- Ah, es que son para mi hermano y no sé cómo va eso.

No reprochas al médico que no esté al tanto de aspectos burocráticos colaterales, pero no está de más conocer el contexto. En cuanto al comportamiento de la farmacéutica, será normal que, sin saber a quién se está dirigiendo trate a todos por igual, pero a ti te pareció encomiable.

6 comentarios:

ANgazu dijo...

Pues sí, me perece encomiable el comportamiento de la farmacéutica, máxime cuando los médicos, quizás por la falta de tiempo, no suelen explicar como tomar los medicamentos, su posibles efectos secundarios y otros datos que, afortunadamente, te explican en la farmacia.

Saludos.

Anónimo dijo...

Siempre a favor de la igualdad. A mí me lo explica un farmacéutico. Entre las explicaciones de un facultativo/a, de otro facultativo/a, del prospecto que acompaña a ciertos envases de medicamentos, el necesitado puede hacerse una idea de cómo tomar la medicina: hay quien se toma en dos tragos un bote de jarabe contra la tos y hay quien pone todos los reparos para tomarse un analgésico. Hay que tener en cuenta la presión de los laboratorios farmacéuticos sobre los médicos. Seguramente no hay ni tiempo ni ganas de diagnosticar problemas de salud, ¿cuál es la causa que origina el problema? ¿es nuestra comida nuestra medicina o nuestro veneno? ¿Es nuestro modo de vida sano, o nos enferma el estrés? Es importante se advierta del peligro de sobredosis y las posibles interacciones con otros productos, sea con medicamentos o no. Dejando aparte la deontología específica, podemos preguntar por qué se cobra a unos ese copago y a otros no ¿Quién instauró el copago? ¿Cuánto déficit recupera la Seguridad Social cobrando el copago? ¿En qué se malgasta el dinero de la Seguridad Social que está arruinando la sanidad, por comunidades?. Si vives en Valencia igual tienes una mayor lista de espera. Si vives en la república catalana tienes mayor parte de los PGE que si vives en otra comunidad, para ver si los independentistas le dan el voto. Y si quieres un cambio de sexo, te tienes que ir a la comunidad de... ¿Dónde decía eso de que todos los españoles somos iguales ante la ley? ¿Cuántas asociaciones de mujeres hay reivindicando la igualdad por 3,3 millones de €? Menudo disgusto si estos ultraderechitas someten a una auditoria a todos los organismos oficiales y les quitan esa subvención a estas asociaciones, ¿de qué van a vivir esos cargos, de las subvenciones para los parados, de las subvenciones para los sindicatos?. Los impuestos que cobran por un lado a unos y se los subvencionan por otro lado, a otros. Yo creo que es por influencia del Brexit, si no es por la culpa de Franco.

Anónimo dijo...

Un médico es un juez que determina el mejor tratamiento y la industria le paga viajes, hoteles, cursos, libros o comidas. La enfermedad, un negocio para la industria farmacéutica, que supera las ganancias de la venta de armas, o las telecomunicaciones. ¿Hasta dónde debe llegar la relación entre las empresas que fabrican los medicamentos y los médicos que tienen que decidir el tratamiento de sus pacientes?. La relación entre médicos e industria puede ser productiva, pero el problema está en determinar qué actividades son beneficiosas para el paciente y cuáles no. El objetivo de las actividades de formación es “ayudar al médico a que prescriba según la evidencia científica disponible y aunque no se niega la influencia que se pueda ejercer sobre los facultativos, ésta se puede considerar positiva en la medida en la que se le ofrece al médico información sobre los mejores medicamentos disponibles. El primer contacto entre la industria y la comunidad médica se realiza través de los conocidos como visitadores médicos, representantes de la industria que ofrecen información a los especialistas sobre los medicamentos disponibles y los contactos con estos representantes de la industria pueden debilitar la calidad de las prescripciones. Hay suficientes pruebas de que los congresos médicos están al servicio de valores muy cuestionables que van en contra de la medicina y el sistema de salud y que solo favorecen a los departamentos comerciales de las farmacéuticas y a las cadenas hoteleras.

Anónimo dijo...

El colesterol no es una grasa y no aumenta sus niveles por comer colesterol o grasas.

Las estatinas para bajar el colesterol son inútiles, muy peligrosas y provocan más enfermedades (ictus, diabetes, rabdomiólisis, derrame cerebral, aterosclerosis, demencia, miotoxidad del músculo cardíaco, alzheimer, etc).

Si su médico le receta estatinas cambie de médico.

Richard Smith, Médico y exdirector del British Medical Journal, asegura que los médicos acabarán cayendo en desgracia ante la opinión pública, como ya ha ocurrido con periodistas, diputados y banqueros, por no haber sido capaces de ver hasta qué punto han aceptado la corrupción.

Anónimo dijo...

Nadie dice que la sidra asturiana sea mala. Vicente Díaz le canta a la sidrina. El pincho de picadillo seguro que no te produce ardor porque la condimentación está equilibrada y el sabor es delicioso. En casa comes otras cosas... si la mujer te deja reparada comida, si no, la socorrida latilla de anchoas. Los productos alimenticios que nos anuncian, no son tan sanos como quieren hacernos creer, ni siquiera la leche. La leche no es un alimento, es un negocio. Si comemos productos malos, nuestra salud se resiente, incluso con los productos enriquecidos. Mis abuelos comían bien y sano, tenían un trabajo duro (no había electrodomésticos, por ejemplo) y estaban satisfechos, dormían bien por las noches sin mala conciencia, sin tomar pastillas siquiera.
Algo tendremos que cambiar para no enfermar y no tener que alimentarnos de pastillas. Falla la satisfacción de la vida, falla el sistema público, esas organizaciones que, en esta parte del mundo, se ocupan del bienestar social, para no tener que gastarse el dinero en farmacia. Fallan nuestros políticos, arribistas, corruptos, que buscan la confrontación más que la solidaridad. Nuestros políticos nos producen muchas insatisfacciones, si en nuestro trabajo no nos realizamos, si tenemos un jefe que abusa de su poder y nos produce urticaria, si tenemos unos compañeros que ni ven, ni oyen, ni entienden, o si estamos en el paro, los productos de la farmacia no van a ser suficientes para hacernos sentir satisfechos de nosotros mismos, ni de la sociedad en la que vivimos. La farmacia no es la solución para nuestra sociedad actual en nuestra piel de toro, excluyendo, claro está, a Portugal. Parece que la hoja de ruta de algunos políticos es encabronar al máximo a los electores contra los otros partidos y enriquecerse en la primera legislatura. No hace falta dar nombres, cada uno que elija los que le parezca que son tan repudiables. Algunos pensaran que esos seres deleznables son de derechas y otros pensaran que esos seres deleznables son de izquierda. La farmacia no palía.

Anónimo dijo...

Farmacia. Parafarmacia. Herbolarios. Masajistas y fisioterapeutas. Echadores de cartas con dotes adivinatorias. Exorcistas. Brujerías y demás parafernalias del curanderismo, no son suficientes para aliviar toda la angustia del hombre/mujer moderno/a. Ha muerto el senador Vicente Álvarez Areces, a los 75 años, sin haberse podido acoger a la jubilación. Vocación política de servicio público. Sus herederos se lo agradecerán. Y sus compañeros también. Que corra el escalafón, que otro vendrá que bueno le hará. R.I.P. Ni la farmacia, ni las demás parafernalias, han podido impedir su muerte repentina. El anterior alcalde a Tini Areces murió de pena, por la marginación, el bulling de sus compañeros socialistas. En política, lo de Iglesias y Erejón, es algo normal. Lo de Tania e Irene es normal hasta fuera de la política.

Areces: el Presidente de la Corrupción, tales han sido los escándalos que han manchado su legislatura. Si ha habido algún presidente que ha errado estrepitosamente a la hora de discernir y perseguir el bien común asturiano, éste ha sido, sin duda, Vicente Álvarez Areces. Escándalo del Petromocho, Caso Marea, que implica a José Luis Iglesias Riopedre, hombre de confianza de Areces durante tres décadas y consejero de Educación y a María Jesús Otero, directora general de Planificación y mano derecha de Riopedre. Contratos millonarios a Igrafo y Almacenes Pumarín. ¿Qué papel juega Vicente Álvarez Areces en esta descomunal red de corrupción que también afectaba a funcionarios, altos cargos y cargos de confianza del gobierno socialista?. ¿Acaso Areces no conocía una malversación de fondos públicos que se estima que ronda los 11 millones de euros en colegios y centros públicos? En vez de ejercitar la sabiduría y la virtud apropiadas para defender los intereses de la sociedad asturiana, el presidente de Asturias miraba hacia otro lado respecto a lo que estaba pasando en la Consejería de Educación, la segunda más importante del Principado en cuanto a asignación presupuestaria se refiere.
La adjudicación del modificado de ampliación de El Musel abre un proceso judicial por el que se cuestiona una adjudicación con un sobrecoste de 250 millones de euros que representa más de una cuarta parte de todos los fondos comunitarios detraídos en casos de corrupción. La trama Gürtel supuso un daño de 120 millones para las arcas públicas. En enero de 2005 se adjudica por unos 500 millones de euros más IVA. El 4 de enero de 2005 se adjudica, por unos 500 millones de euros, más IVA, el contrato de ejecución de las obras de ampliación del puerto de Gijón. HC ponía a disposición del futuro adjudicatario de la ampliación del puerto de Gijón, la cantera de Aboño... De todas estas cosas no

No son anécdotas del PSOE andaluz de Chaves y Griñán. No son corrupciones del dictador Franco, ni de los ultraderechistas de Vox. Ni son las leyendas de Carrillo, ni de la Pasionaria. Los independentists
La FARMACIA no puede curar el odio, el rencor, el resentimiento, la sed de venganza, de revancha, la avaricia, el abuso de poder, ni de ninguna de las dolencias, que como la carcoma, van desmoronando el ánimo, la convivencia, la solidaridad, las ganas de construir y no de destruir. Y el propósito de algunos políticos es dividir con el claro propósito de vencer y a veces les sale el tiro por la culata, como a Susana Díaz con el PSOE andaluz.
Así va el país.