Está la izquierda asturiana (y su prensa panfletaria amiga) sobresaltada y sobrecogida porque la diputada popular María Teresa de Lara, defendió ante el diputado socialista lenense Hugo Morán que el carbón patrio es peor que el extranjero. Armose la marimorena. Sin embargo, se piensa que los tiros van por ahí, pero hay cosas que no se pueden decir.
En esa colección de referencia en los años 70, la Colección Popular Asturiana, de la editorial Ayalga, Juan de Lillo publicó un exitoso libro: Asturias: una crisis permanente. En el capítulo dedicado al carbón lees que la polémica no es de ahora. Ya en 1864 la Armada sacó a concurso la compra de 24.000 toneladas de carbón para combustible con la condición de que procediera de País de Gales, que estimaba de mejor calidad.
El Partido Socialista va a perder las elecciones, además de por la crisis, por empecinarse Zapatero en que no había tal, o que si la había, ya estaban naciendo brotes verdes. Lo malo es que si admitía la mala marcha de la economía, sería el PP quien acusaría de falta de patriotismo.
¿Quién decía que la verdad os hará libres? Mentira, el que dice las verdades pierde las amistades.
2011/10/29
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2 comentarios:
Qizás se acordó de Séneca y decidio poner en práctica su frase: "Prefiero molestar con la verdad que complacer con adulaciones"
Saludos.
Sí y no. Verdades a medias.
Nuestros políticos son de risa. Verdad absoluta.
Seamos serios, no podemos ser tan párvulos de decir que un carbón es mejor o peor por que 1 kilo del mismo de más o menos calorías.
Además, ¡Ni siquiera el carbón asturiano, leonés o palentino es homogeneo!.
Quizá sea importante saber, amén de cuanto calienta, el contenido de azufre, las condiciones de extracción, y un largo sin fin de detalles.
¡Ah!, que si es así no podemos las derechas dar dinero a fundaciones para que investigen como reducir el SOx ni las izquierdas salir a la calle 0,7 YA.
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