Seguramente los libros de historia que estudian los alumnos serán más rigurosos, no citarán ni a la Virgen ni a Pelayo, pero la primera versión que el oído de un niño oye sobre la historia de Asturias, quizá al poco de aprender a leer, se remitirá a Pelayo porque es más digerible para un niño y hasta para un padre. Lo que bien se aprende, mal se olvida.
Cuando el niño o el adolescente, más adelante, tengan que estudiar la historia, el texto dirá otra cosa, pero en cuanto pasen unos años, salvo que el alumno se dedique profesionalmente a la historia, el rigor se irá olvidando y el mito aflorará y quedará para siempre.
Los mitos valen para las piedras de Pelayo, para la fundación de las naciones, para los comportamientos humanos, para la pasión futbolera,.., en definitiva, justifica el dicho se non è vero, è ben trovato
1 comentario:
Se necesita una gran fuerza mental para cuestionarlo todo y no dar nada por sentado. Incluido lo que nos dicen que es historia, que según quien lo cuente, puede ser más cuento que los de Calleja. En un momento interesaba la leyenda de Pelayo, porque resultaba muy épica. Ahora se crean nuevos mitos. Por comunidades la historia cambia, no es la misma historia de cataluña la que se enseña ahora, que la que se enseñaba hace 50 años ¿cuál de las dos historias es más mentira? Y lo mismo que en cataluña, en todas las comunidades. La historia hay que acomodarla a la situación y los políticos actuales. Hoy ya no se si se dice algo de la mitología griega, romana, escandinava... pero todos estos viejos relatos, incluido el Mio Cid, conforman nuestra cultura y son la base de muchos libros y películas actuales. La globalización mata la tradición y quien más influencia tiene, gana, impone su moda, ya sea el halloween, el viernes negro y pronto el día de acción de gracias, que no tiene nada que ver con las costumbres ni tradiciones españolas. Los cantos de sirena nos siguen agilipollando. Y comercialmente da beneficio.
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