de la mano.
Coraje y alegría: Yo a los palacios subí
Hace 5 días
2019/02/08
ESCRITURA PATROCINADA
Cómo un mismo hecho te puede parecer bien y mal a la vez es cosa difícil de defender, pero es. Que el Ayuntamiento de Ribera de arriba, con su alcalde a la cabeza, haya organizado hace quince años el primer certamen de pintura rápida en Bueño y desde entonces la haya logrado mantener año tras año; que hace dos haya encargado a varios escritores reescribir la historia del concejo bajo la dirección de Juan Gona y que hace unos meses haya reunido a esos escritores para presentar los trabajos resultantes; que hace unos días haya reunido nuevamente a varios escritores para conocer la gloriosa Ribera, y se supone que para difundirla, tiene un mérito indudable para la promoción del concejo.
Que unos escritores reconocidos se presten a ello, te gusta menos. Indudablemente, uno puede escribir de lo que le plazca y cobrar de quien le pague, pero es difícil pensar que la pluma vuele con libertad cuando hay un patrocinador. Dicho eso, las páginas seguramente resultarán bellas porque la belleza y la libertad no tienen que ir necesariamente
de la mano.
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1 comentario:
Estamos de acuerdo. Ya era hora que estemos a favor de la libertad y en contra de las cartillas de racionamiento. Te estás volviendo muy liberal en la defensa de las iniciativas individuales que buscan limitar la intervención del Estado en la vida económica, social y cultural. Y promueven las libertades civiles. Y se oponen al despotismo. Hay que atar al burro donde manda el amo. La independencia es muy difícil. Para ser independiente es necesario no depender de nadie, ni económicamente, ni afectivamente, porque nunca se debe morder la mano que da de comer. Hay periodistas que, por no morder la mano, pierden todos los escrúpulos al servicio de la manipulación de masas. Da miedo esta tendencia de re-escribir la historia.
Me gusta la Santa Espina y no entiendo las razones para prohibirla y no prohibir por ejemplo el romance del Prisionero, que empieza: 'Que por mayo era por mayo, cuando hace la calor, cuando los trigos encañan...' frente a: '...Canta el pájaro, el río, la planta, cantan la luna y el sol...' Y en algún país mataron hasta a los gorriones, no se si para impedir el canto de las aves como manifestación de libertad o para que no se comiesen las escasa cosechas. Sea como fuere, están acabando con todos los cantos tradicionales, con todo el folclore identificativo de cada región de España, con sus bailes, con su gastronomía típica, así como con ciertos oficios. Perdemos nuestra identidad por puro esnobismo. Somos seres uniformados, aunque reneguemos de los uniformes. Una gran mayoría se corta el pelo como ciertos futbolistas, los pantalones rotos, las deportivas y la gorra con la visera en la nuca, aunque sea de noche. Los medios de comunicación conforman el gusto de la gente, nos idiotizan para que no protestemos ni cuando nos mean encima, queriendo convencernos de que llueve. Y todo para mantenerse en el machito, impidiendo llegar incluso la ayuda humanitaria a la población más necesitada. Esto es el comunismo. No es el comunismo de Platón en 'La República', no es el comunismo de Lenin. Tampoco es idílico el socialismo de USA. Mucho mejor la monarquía democrática parlamentaria de Noruega, que es un buen representante de la calidad de vida que ofrecen los países líderes en igualdad laboral entre hombres y mujeres y reconocidos por su protección de la familia. Su sistema educativo está considerado entre los mejores del mundo. Igual que en Cataluña. Igual que en Andalucía. Canadá ha sabido establecer un sistema económico a medio camino entre el liberalismo económico y la oferta de amplias coberturas sociales. Es un estilo de vida en el que las cosas sencillas son las más importantes de la vida. Pasar tiempo con la familia y amigos, conciliar trabajo y vida personal, tener pocas posesiones, cuidar el medioambiente y estar en contacto con la familia es su ideal. La democracia y la libertad personal se consideran valores en sí mismos. ¿Será tan difícil conseguirlo? Con nuestros políticos...: imposible.
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