Este lío de los taxistas y del alquiler de los coches con conductor dio o puede dar lugar a un nuevo género de competencias autonómicas. Te explicas: unas materias son de competencia estatal, otras son de competencia autonómica. Estas son a veces asimétricas, es decir algunas materias son de competencia exclusiva estatal, otras son de competencia exclusiva autonómica y otras son de competencia autonómica previo acuerdo (a veces no lo hubo y se necesitó sentencia) entre Estado y Autonomías.
En el fragor de la batalla, el gobierno central ofreció a las Comunidades Autónomas hacerse cargo de la gestión de las licencias correspondientes, pero solo a las autonomías que quisieran. Una autonomía maximalista la querría a cualquier precio, y si es gratis, no digamos; una autonomía minimalista lo lógico es que las rechazara; una autonomía maniobrera las asumiría en función de cómo transcurrieran las negociaciones y correspondientes compensaciones.
Sobre el fondo del asunto del alquiler de coches con conductor no tienes opinión formada, no profundizaste lo suficientes en el fondo y no querrías aventurar una opinión según tus intereses o a juzgar por la última experiencia con un taxista o con un coche con conductor, pero en las transferencias a petición tienes claro que esa asimetría es un disparate desde el punto de vista organizativo y una injustificable dejación de funciones.
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1 comentario:
'...pero en las transferencias a petición tienes claro que esa asimetría es un disparate desde el punto de vista organizativo y una injustificable dejación de funciones.' La patata caliente no la soporta nadie, es mejor pasar el muerto a otro. en cuestiones de justicia es mejor escuchar y obedecer al Tribunal Constitucional. Pero así la Colau tendrá un problema en sus calles y la Carmena otro en Madrid y también habrá problemas en Valencia y en Sevilla, pero no en los pueblos donde no hay competencia taxis-vtc. Hay gente que quiere mantener sus privilegios por encima de la justicia distributiva y denuncia cualquier tipo de competencia. Como pasa con los maquinistas de Renfe y las operadoras privadas que van a entrar tras la liberalización del sector de transporte por ferrocarril.
Un taxista que ha comprado su licencia en la reventa no podrá especular con ella si hay competencia con el alquiler de coches con conductor y ya nos quejamos bastante de los monopolios que había con el régimen de Franco. Yo estoy a favor de licencias al 50-50 y si puedo, no tomo ni tomo ni uno ni otro. Mejor en bus. Bus y tren es lo que hay que potenciar en las terminales de los aeropuertos. Pero para lograrlo hace falta un gobierno comprometido y con el apoyo de los votos de los electores, que no es el caso.
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