2011/06/04

RUBALCABA, PASADO, PRESENTE Y A LO MEJOR (o peor) FUTURO

Tomando la sidra y el correspondiente pincho de picadillo en El Fontán mientras lees el periódico, te fijas en una foto de Rubalcaba y caes en la cuenta de cómo admiras a los brillantes humoristas que destacan los rasgos físicos o sicológicos más notorios de cada persona, esos detalles que estás harto de ver pero que te pasaron toda la vida desapercibidos. De hecho hay personajes que desde que aparecen retratados en determinados sketchs, eres incapaz de verlos de otra forma. Así te ocurrió con los muñegotes de Canal + de Narcís Serra (“Les he de dicho que…”), Jesús Gil (y su Marbiella), o tantos otros.

Lo propio te pasó con Rubalcaba y sus gesticulaciones. Te pasaron desapercibidas hasta que José Mota ejecutó su brillante parodia en la última gala de fin de año.

Ves claramente cómo Rubalcaba representa el pasado y el presente del Partido Socialista e incluso de toda la Humanidad. ¿Por qué esa conclusión tan grandilocuente? Hace unos años leíste al tuntún un libro sobre el origen del lenguaje. De él aprendiste que en principio el lenguaje humano nació de los gestos. Los animales no hablan, se entienden por gestos u otras manifestaciones no verbales. Con la evolución acabamos llegamos a hombres, se fue adaptando el aparato fonador y el lenguaje verbal empezó a complementar al entendimiento gestual. El tiempo pasa y pasa y la palabra acaba arrinconando al gesto como forma de expresión.

Rubalcaba es un ejemplo de la vieja guardia homínida y política. Como Monterroso, cuando el Partido Socialista despertó, el dinosaurio todavía estaba allí, y, en moderna expresión, reivindica el derecho al lenguaje no verbal. Rubalcaba se expresa con gestos. Claro que a lo mejor el dinosaurio era él.

Comparas a Rubalcaba (gesto y lengua) con Chacón (impasible cara de palo) y caes en la cuenta de cómo Rubalcaba convenció al Zapatero remendón por dominar el lenguaje verbal y el no verbal.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Alfredo se expresa con obras. Tiene un pasado y quiere un futuro. Su pasado quizá le impida el futuro que ambiciona. En qué se diferencian sus hechos de los de un político sin escrúpulos de derechas. Es posible que no haya acciones de izquierda o de derecha, sino acciones necesarias ante un a situación concreta. ¿Acaso este socialista obrero no vive como un capitalista, como hacen muchos otros socialistas aburguesados? Acaso éste es el mejor preparado de la pléyade de ministros y militantes socialistas. ¿Antepone Rubalcaba el bien de la mayoría de los ciudadanos a su ambición personal? Acaso le importe más el sillón de presidente.

La_Nenina dijo...

Pues a mí Chacón y Rubalcaba se me parecen a un matrimonio que yo conozco muy bien... ejem ejem

Anónimo dijo...

menuda promesa de la politica.....