2011/01/29

VAMOS MARCHAR D'ESTI PUEBLU

No estamos en Navidad pero vamos a recordar un villancico de Víctor Manuel.

Vamos, despierta, María
que ta llorando el tu neñu
dai de mamar, que tien fame
cantai suavín que tien sueñu.

Pon'i l'albarda a la burra
vamos marchar d'esti pueblu

Una pena que se acabe muriendo el asturiano. Eres un mal bablistaparlante y peor bablistaescribiente, pero eres un enamorado del bable sencillo, no artificial ni artificioso, aunque comprendes que por aquello del “hecho diferencial” (lingüístico) se busquen los giros más rebuscados y alejados del castellano.

El asturiano no se distingue únicamente por el uso de determinadas palabras, sino también por giros sintácticos diferentes. Así lo entiendes después de leer el volumen II de las “Cuestiones d’asturianu normativu” de Ramón d’Andrés, un libro ameno escrito en una lengua asturiana comprensible que no te cabrea porque piensas que como él escribe pudo hablarse alguna vez.

Lees ahí como el imperativo en asturiano no está calcado del castellano. Por ejemplo, en la primera persona del plural, para “marchar”, no sería “marchemos”, sino “vamos marchar”. Para ti, “vamos marchar” no era imperativo sino intencional, pero una intención que se podía plasmar de inmediato o no. Es ahí cuando te viene a la mente “El portalín de piedra” de Victor Manuel, con una sucesión de imperativos (dai de mamar, cantai suavín, pon’i la albarda, vamos marchar), donde “vamos marchar” es otro imperativo, que marchemos ya, porque “nos lu quieren matar” (al neñu) y yo nun quiero perdelu”.

El portalín de piedra, con un sentido y una ortodoxia que no sospechabas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Nun tan tan mal les coses como pa tener que marchase.
Hay que aguantar y dir con la cabeza bien alta.