2012/11/25

DE HOSTELEROS Y VECINOS

¿Dónde mejor que en El Fontán para leer un artículo sobre El Fontán? eso ocurrió este sábado mientras dabas cuenta de la botella de sidra y el reglamentario pincho de picadillo a la vez que leías el artículo semanal del vehemente Gracia Noriega, siempre alejado de los términos medios y los paños calientes.  

Se refiere al conflicto que una Asociación de Vecinos mantiene con el añejo bar, con victoria parcial de aquella, que de momento obligó al hostelero a dejar libre el espacio bajo los soportales de la plaza interior. Todavía permanecen las sillas y mesas en los soportales exteriores, quizá por poco tiempo. Cuando se consolide la victoria, tendrás que mudar de costumbres porque el paso entre columnas acabará siendo territorio de colgados y tirados varios, eso sí, con la ley, la botella y la papelina en la mano. No sólo está preocupado el dueño. Hace unos días uno de los camareros confesaba su inquietud ya que pasaban a depender únicamente del clima ya que las lonas del aire disuaden solamente de cuatro gotas.

Conoces pocos casos de feliz convivencia entre hosteleros y vecinos, que pueden ser incluso gente caleyera y nada abstemia, pero ejercen sus aficiones como mínimo a veinte metros de su respectivo portal.

No hay comentarios: