Dicen que Pepiño Blanco va a fusionar empresas públicas. No será para tanto, pero sí que unirá departamentos que se divorciaron en los tiempos de bonanza. ¿Tiempos de bonanza? No tienes constancia de que nadie haya conjugado nunca la bonanza en presente: “tenemos tiempo de bonanza”. Siempre se dice que los hubo cuando terminaron. Quizá sea el reflejo del mito helénico de la edad de oro, el paraíso perdido trasladado al lenguaje psicoeconómico.
Dicen los gurús que hay que estar “alineados”. ¿Qué es estar alineado? Simplemente es obedecer, no necesariamente estar de acuerdo ¿o hay que estar de acuerdo con cada nuevo gurú con mando en plaza?
Es curioso que una buena parte de los directivos que pilotan las hiperespecializaciones, ahora se pongan al mando de reunificaciones y sinergias. ¿Estaban alineados antes? ¿Lo están ahora? Ya vio uno muchas cosas como para tener que estar de acuerdo con cada nueva ocurrencia. Lo peor, el descreimiento, la pérdida de la ilusión, eso incluso en el caso de que la afectación personal sea neutra.
“Venceréis, pero no convenceréis”, como proclamó Unamuno ante Millán Astray.
Salvando las distancias, se pone uno en el pellejo de los que ven amenazado su puesto de trabajo.
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1 comentario:
¿quien corre mas peligro, los pastores o las ovejas?
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