ARCELOR MITTAL: LLEGA EL CAPITALISMO

Llevas semanas leyendo noticias nada halagüeñas de Arcelor Mittal, heredera de Uninsa, Ensidesa, Corporación Siderúrgica Integral, Aceralia, Arcelor y quizá te quede algo por el camino.

Ibas a escribir entonces, si no estuvieras entretenido con los linajes, sobre las contratas y sobre la idea de propia actividad, que es un concepto polémico en el Derecho del Trabajo cuando se discute sobre las consecuencias jurídicas de subcontratar una parcela que pertenezca a “la propia actividad” de la empresa. Es un concepto-chicle imposible de despachar en una línea, pero ahora, cuando la crisis aprieta, resulta que incluso las contratas entienden que hay sectores que son de su propia actividad, que, por lo tanto, no puede asumir la empresa principal, de tal manera que podrían seguir trabajando los subcontratados y cesar los fijos porque aquellos realizan funciones intrínsecamente subcontratables. En fin, sirva lo anterior solo para escenificar la encarnizada lucha por el empleo y cómo se trastocan los conceptos tradicionales.

Lees las semanas siguientes un globo sonda al que no notas que se le haya prestado especial atención y es que la dirección de Arcelor Mittal (divide y vencerás) plantea meter en plantilla a la mitad de los subcontratados, con lo que se desprende sin mayor problema de los sobrantes, y allá se peleen entre ellos.

Hoy al leer en la portada de La Nueva España que Arcelor comienza regulando a sus directivos, te acuerdas de las barbas peladas del vecino, un vecino un poco lejano, porque distas mucho de pertenecer a los directivos, pero te viene bien el refrán para este blog tan poco riguroso.

Ya en el interior lees que empieza afectando a la Asesoría Jurídica y te interesas por el asunto. Por suerte, tu hija dejó a tiempo la empresa y también escapó del anunciado cierre de oficinas de La Caixa. Hasta ahora va acertando.

Oyes de primera mano que la situación es preocupante, pero que lo importante es el trasfondo, que es un toque de atención, pero que el ERE es muy bueno, que en el verano no será tan negativo porque se confundirá con las vacaciones, que el servicio de todas formas va a salir y que para ello los directores de área podrán elegir con el dedo en función de rendimientos. Te recuerda al harakiri de las últimas Cortes Franquistas, que votaron, tan contentos, su propia muerte.