2019/06/10

DENOSTAR LOS PACTOS

No estás por denostar los pactos post-electorales. Estás, más bien, por denostar a quienes los denuestan con una acritud lapidaria que te repele como actitud y como ideología.

Con las elecciones recién celebradas, no verías lógico un pacto entre partidos alejados ideológicamente dejando fuera al situado en una posición intermedia. Por poner ejemplos, no verías lógico ahora un pacto entre el PP y Podemos dejando fuera al PSOE, o un pacto entre IU y VOX dejando fuera al PP o a Ciudadanos. Sin embargo, si, avanzada la legislatura, se produjeran casos clamorosos de corrupción, verías lógico y hasta deseable una pinza a la griega para echar al corrupto. Ahora, no.

Dicho lo anterior, ves perfectamente legítimo que los partidos y los líderes jueguen sus cartas, apuren pactos, y tácticas y hasta vayan de farol. La habilidad es importante, también en política. No descartas que el ego del líder nacional, autonómico o local pueda tener un peso superior al del interés general, pero entiendes también que si intentan gobernar es porque creen tener el mejor programa.

No cabe apelar a lo que quieren o dejan de querer los ciudadanos porque las posibles interpretaciones son variopintas. Los electores simplemente votan y el voto no limita ni veta pactos, tampoco los señaliza. Los militantes de cada partido podrán, a posteriori, vetarlos, pero los electores no. Unos partidos harán caso a sus militantes, otros no, allá ellos con sus militantes y sus estatutos.

A estas alturas no sabes en qué acabarán los pactos, pero no se te ocurrirá tildar de ilegítimo el gobierno del Ayuntamiento de Madrid, ni su Comunidad, ni el de Barcelona, ni el de Oviedo, sea cual sea su resultado, aunque lógicamente tienes tus preferencias. Por lo tanto, verás legítimo que en unos casos unos partidos vayan coaligados con unos, y en otros con otros, sin por eso traicionar nada. En cuatro años no se termina el mundo y el elector tiene la oportunidad de enmendar el yerro, que también es SU yerro. Pero, exabruptos contra los pactos, no.

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