2010/08/12

LA CIUDAD DE LOS PRODIGIOS, de Eduardo Mendoza


Leíste en vacaciones, debajo de la sombrilla, entre cerveza y cerveza, LA CIUDAD DE LOS PRODIGIOS, de Eduardo Mendoza.

Es una lectura de obligado cumplimiento porque la novela pasa por ser una de las grandes del siglo XX. Tiene pretensiones de ser la novela de Barcelona, porque entre párrafo y párrafo va contando a retazos la historia de la ciudad. Como bien resume la contraportada, el protagonista, Onofre Bouvila, es un pícaro que asciende a la cima del poder financiero y delictivo.

Pasados quince días, después de leídas las 474 páginas, ¿de qué te acuerdas? ¿la volverías a leer? Sería absurdo a corto plazo, no te vas a acordar de todos y cada uno de los párrafos, es más, no eres capaz de recordar ni media línea. El argumento se va olvidando. En cuanto al estilo, no eres un especialista para sacar ninguna conclusión. Dicen que es buena y lo crees.

Pese a este escepticismo, seguirás leyendo porque algún vicio hay que tener y algo hay que contar a los amigos

1 comentario:

Karen Dinesen dijo...

Luis Simón:
No comparto la afirmación que haces sobre que "dicen que es buena y lo crees". Nada de eso. ¿Qué criterios son los que objetivamente puede permitir encuadrar a una obra literaria como "buena"?...
Supongo que hay expertos (críticos literarios), como en todo, que estarán dotados de condiciones apropiadas para establecer una valoración (¿objetiva?)...diría yo, "de experto"
Yo sólo puedo decir (claro que no soy experta) cuando algo me engancha y me satisface. Que puede coincidir o no con el número de ventas o con las valoraciones de los críticos..¡A saber!
Y de ésta, concretamente,tengo muy buen recuerdo. Lo que no le supone "bondades objetivas".
Salud y saludos.