2008/10/20

LA CRISIS: UN GIGA DE AIRE

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Hará más de un mes te dijeron que si no escribías nada de la crisis y no escribiste nada, o a lo mejor algo de pasada que ya no recuerdas. En conversaciones de café, de cocina o de coche, mantenías que era una crisis psicológica, que de tanto hablar, algo acabaría habiendo. Además, tú eres un ciudadano obediente y si tu presidente dice que no hay crisis, no la hay.
Más tarde empiezas a oír a tu presidente que, de haber, será una crisis financiera, pero no económica y la idea te gusta más.
Quiso la casualidad que este fin de semana entregaran en Madrid a tu hija el diploma de un máster que hizo el curso pasado sobre mercados financieros internacionales o algo así, que tú no entiendes ni papa y ni recuerdas el nombre con precisión. Hiciste unos kilómetros hasta la Corte para acompañar al personal y, de paso, para oír un par de conferencias que en el marco del acto pronunciaban conocedores de las finanzas. El Jefe de Estudios del BBVA pintó un panorama mundial bastante gris a corto plazo y el responsable de mercados internacionales del Banco de Santander, en román más paladino vino a decir que los bancos tendrían que plegar velas y volver a su negocio tradicional de depósitos y préstamos y olvidarse de todos esos mercados intermedios que fueron engordando en todo el mundo, y que los matemáticos y físicos que contrataron todas esas entidades para inventar o maquillar la realidad con números actuariales, tendrían que buscar otra salida profesional.
Te enteras de que todos esos mercados son, poco más o poco menos, una pura lotería. Entonces enlazas con una de las pocas cosas que entendiste de la matemática moderna: los sucesos estocásticos, es decir, la pura suerte.
(Te dirán que entendiste lo que quisiste entender y que sólo te quedaste con tus ideas preconcebidas; puede ser, admites el tirón de orejas).
Tú como ya antes no lo entendías, todo eso de los mercados de futuros, te parecía que era paja. De hecho jamás invertiste un duro ni en swaps (seguramente no se puede invertir en swaps, así de grande es tu incultura financiera), ni en fórums filatélicos, ni en intangibles, y pasaste de titulizaciones, de ratings, de activos subyacentes, de mercados exóticos, del put-call, y de los tipos de interés forward.
Pasabas de largo como de los artículos de física cuántica, porque no los entendías, ahora comprendes que fue aire. Seguirás copiando de Santo Tomás, ver para creer.
Pese a que la mayor parte haya sido vacío, te dicen que algo habrá servido para mover la economía, que habrá tirado de la inversión y del empleo.
Repartidos por las meses había lápices de memoria con el rótulo del máster y te dijiste que qué bien, que allí estarían las conferencias y que en casa las repasarías con detalle. El lápiz estaba vacío, como el cascarón financiero.
En fin, pese a la bola de nieve, alguien prosperó estos años, que le haya ido bonito. Tú, al menos sacaste en limpio un giga de aire.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hubiera sido mejor un giga de sidra!

Anónimo dijo...

si Alsa va mal Asturies vá mal............que le pregunten a Easy Jet a Spanair y al tren de velocidad mediana que nunca llegará.Pa los bancos ya vendrá ZP a rescatarlos después de la orgia de ganancias de años pasados.Humo es lo que nos venden.Alfredo

Anónimo dijo...

La verdad, me has dejado muy preocupado con lo que diría el Jefe de Estudios del BBVA ( el que pintó un panorama mundial bastante gris a corto plazo) y el responsable de mercados internacionales del Banco de Santander ( el que en román paladino vino a decir que los bancos tendrían que volver a su negocio tradicional ) .
Procuraré no dar muchas vueltas en la cama.
Salud
Salud