2015/10/25

LA CATEDRÁTICA DE ÉTICA

Con motivo de la entrega de los premios Princesa de Asturias visitan esta tierra ilustres personalidades de todos los ámbitos de la humanística. Nos transmiten en píldoras algunas reflexiones y de paso nos ayudan a reflexionar.


Crees que tiene razón en el titular, pero aprovechas para divagar sobre las consabidas intrigas a la hora de aspirar a plazas de profesor o catedrático de Universidad: esa plaza de catedrático de Matemáticas, aquella otra de Macroeconomía, la de más allá de Derecho Mercantil, sea en aulas de aspirantes a juristas o a economistas, en fin, de cualquier ámbito. Y también piensas en las vacantes de profesor titular de Ética y es aquí donde te asalta la duda ¿son más beatíficos, racionales, impolutos estos aspirantes, o la ética también se salpica de la mundanal porquería?


En cualquier caso, sea saludada la oportunidad de reflexionar, y si la herramienta sirve para llegar a la bondad, miel sobre hojuelas. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿En los mejores puestos están los mejores funcionarios?
Si uno es dueño de Alsa, no hay discusión. Si uno es presidente de Renfe sí. Si uno es presidente del banco de Santarder, no se cuestiona nada, si es presidente de Cajatur-Liberbank, Cajamadrid-Bankia, sí.
Ya no se enseña filosofía, no se enseña ética, se enseña a trepar, a medrar, a no tener escrúpulos, a no tener conciencia. La justicia no busca la equidad, porque no todos somos iguales ante la ley, algunos estamos más igualados que otros.
'...la sociedad sufre de "baja moralidad" y se sitúa por debajo de los umbrales de la justicia, y que la falta de ética ha provocado la fuga de capitales y la pobreza. Advirtió de que "no se puede hacer democracia con mediocres. Necesitamos personas excelentes" para lograr una sociedad justa.' Adela Cortina, la primera mujer que entró a forma parte de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas (en 2008) y es miembro del jurado de los premios "Princesa de Asturias" de la Comunicación y Humanidades.