2017/03/25

CAMINANDO JUNTO AL ATENTADO

No uno ni dos, varios amigos del WhatsApp te hacen llegar la foto de una mujer de vestimenta árabe que camina sin mirar hacia su derecha, donde  una persona que acaba de sufrir un atentado permanece tirada en el suelo.

La mayor parte de los mensajes no se limitan a enviar la foto en sí, sino que la acompañan de algún comentario alusivo a la actitud de la mujer árabe relacionándola con su etnia y religión.
En un primer momento tiendes a pensar en la crueldad de los musulmanes, en lo desigual de nuestra lucha.

Sin embargo, si consultas algún medio, te das cuenta de que esa foto forma parte de una intoxicación informativa. Para compensar, o simplemente para pensar, se aportan diferentes fotos en las que aparecen otras personas de raza no árabe, dando a entender que la indiferencia, y acaso el apoyo a los atentados, no son exclusiva de los árabes o de los musulmanes, porque esta guerra de dolorosa actualidad no sabes si es racial o religiosa.

Vaya por delante que los musulmanes no se hacen acreedores de ninguna simpatía. Dicho lo cual, lo riguroso sería apostarse frente al lugar del atentado y contar (alguien dijo que la calidad, y quizá la vida, era contar y volver a contar), contar, insistes cuántas personas y de qué razas y de qué religiones pasaron frente al herido, y de las anteriores cuántas mostraron alguna señal de pavor o siquiera de conmiseración, y todo ello ponerlo en relación con el número total de religiosos o raciales o raciados. Así te podrías hacer una idea del porcentaje de indiferentes o de desalmados, pero como no puedes contar ni tienes quien te lo cuente, no tienes más remedio que fiarte de lo que los medios te vayan diciendo, y a ti te queda únicamente la oportunidad de tamizarlo.

No hay otra. Poca cosa para quien se pretende nada adicto a preconcepciones.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

En la información no hay objetividad. Cuando alguien mata de una manera o de otra, siempre es de otra religión, de otra etnia, de otra calaña y no nos queremos sentir identificados con ella, mate de un tiro en la nuca, mate explotando trenes como en el 11M, mate arrollando gente, o clavándole un cuchillo a su pareja. ¿El fin justifica los medios? ¿Qué consideración debe tener la justicia contra ese/a asesino/a? La muerte de Carrero Blanco ¿fue distinta de la muerte de otro militar, o de otro civil? Si eres vasco reivindicativo lo verás de una manera, si eres familiar de la víctima lo verás de otra. ¿Derechos Humanos? La ley no es igual para todos. Con unos la justicia es más indulgente que con otros. Si los partidos políticos son los representantes del pueblo, yo no me siento representado. La ley se interpreta de una manera torticera por los jueces para salvar o proteger incluso a algunos que no están aforados. Con estos agravios comparativos nos exponemos a esto. Pertenezcas o no a banda terrorista, hay gente que está al límite y es capaz de quitar la vida a quien se le cruce.

Anónimo dijo...

¿Tú qué haces ante una situación como ésta? ¿Te paras y le haces la respiración y el masaje al herido, o sigues de largo? Y sin llegar a casos tan extremos ¿te comprometes con la verdad, o escurres el bulto lo mejor que sabes?

Julio dijo...

Los que me mandan esas fotos, en general tabien son intransigentes

Anónimo dijo...

Claro, la culpa es de quien manda la foto, que ya elige unas sí y otras no, dependiendo de una intencionalidad. Los asesinos no son tan malos.

Anónimo dijo...

Si se habla de gente matada, la gente puede diferenciar si los matados por los mercenarios del estado están bien muertos y si los matados por los terroristas, o los que mata el hambre, o la enfermedad, tienen una vida menos valiosa. Es paradójico que las vidas de los asesinos terroristas esté protegida por la ley y la misma ley permita la guerra contra los habitantes inocentes de otro pueblo. Estos asesinatos son los 'efectos colaterales' de esas acciones que algunos estados realizan contra otros. Ni siquiera la ejecución de Saddam Hussein fue algo bien visto por todos los ciudadanos de la comunidad internacional, porque veían que él podría frenar ciertas revoluciones, que tras su muerte se están produciendo.
El estado debe proteger a sus súbditos, a sus ciudadanos, y muchos estados permiten que a los ciudadanos les roben su propiedad privada más esencial, sin que el estado, con sus leyes, permitan que el ciudadano pueda tomar medidas para defender su propiedad, como tampoco las puede tomar para defender su propia vida y está expuesto a que cualquier delincuente le pueda asestar una puñalada para robarle la cartera, o el coche, o la casa. No sólo el terrorismo quita vidas inocentes. Hay gente que mira para otro lado.

Anónimo dijo...


La oposición denuncia un golpe de Estado en Venezuela. El Tribunal Supremo, controlado por el chavismo, deja sin competencias a la Asamblea Nacional. Freddy Guevara, vicepresidente de la Asamblea, supone que se dictarán nuevas “leyes-sentencias” a favor del régimen. “Esta no es una sentencia más, sino una que marca un punto de no retorno de la dictadura. Ya no sólo se trata de anular todo lo que hace la Asamblea Nacional, si no de usurpar todas sus competencias”, explicó. Los guardianes del mundo pueden mirar para otro lado. Podemos igual ni mira, ni habla. Cuando se le quitan los derechos democráticos a un pueblo ¿importa si el golpe de Estado es de la derecha, o es de la izquierda? ¿Importa cuando se le priva al pueblo de los alimentos más indispensables? El resultado es siempre el mismo. Si el golpe lo diese aquí la izquierda ¿el maniqueísmo te lo puede hacer más soportable, o más intolerable?.

Anónimo dijo...

Hoy otro atentado. Mucha gente mira para otro lado.
«El amor al prójimo no conoce límites ideológicos ni confesionales.»
«Cuando los nazis vinieron a buscar a los comunistas,
guardé silencio,
porque yo no era comunista.
Cuando encarcelaron a los socialdemócratas,
guardé silencio,
porque yo no era socialdemócrata.
Cuando vinieron a buscar a los sindicalistas,
no protesté,
porque yo no era sindicalista.
Cuando vinieron a por los judíos,
no pronuncié palabra,
porque yo no era judío.
Cuando finalmente vinieron a por mí,
no había nadie más que pudiera protestar.»
Martin Niemoeller (pastor protestante, 1892-1984)

Anónimo dijo...

Si miramos para otro lado no nos enteraremos que el Gran Wyoming y su acólito del programa el Intermedio se ha referido a la Cruz de los Caídos como un mierda. A nivel religioso una afirmación así ofende a cualquier cristiano, salvo claro está, a los cristianos del Psoe, porque esa cruz la mandó hacer "Franco..., el sapo iscariote y ladrón ... con la efigie de Cristo prendida del pecho". El fanatismo de Franco, con su religión aliada, han conseguido que la gente no crea ni en dios, ni en los políticos, ni en la justicia, ni en la solidaridad humana. ¿Cómo puede un boby defender a nadie si no es capaz de defenderse a sí mismo? ¿Cuántos miles de millones de armas vende España a países en conflicto? Si miramos para otro lado con lo que está pasando, nos podemos pegar una hostia como la Cruz del Valle de los Caídos.

Anónimo dijo...

Más atentado con un vehículo descontrolado. Máximo nivel de alerta. Terror. Desconfianza. Inseguridad. Y los civiles sin poder repeler estos ataques. Ni siquiera las fuerzas de seguridad los pueden repeler. ¿Civilización? Podemos entrar en el análisis ético sobre cómo dejarse matar como conejos en el propio país por gente de fuera.