2015/01/24

GRAMÁTICA PARDA, de Juan García Hortelano

¿Quién te mandará meterte en lecturas extrañas? El caso es que cogiste entre las manos “Gramática parda”, de Juan García Hortelano, novela de historias imposibles contada con giros chocantes, de geografía y cronología que bailan constantemente sobre arenas movedizas.

A menudo era necesario volver a la introducción crítica para aclararse con unos personajes de trazos tan absurdos que costaba creer que fuera era el mismo del capítulo precedente.

Cuando conseguías seguir el hilo, las historias daban para pensar y hasta sonreír.

“Lo que me desenfrena es la clase de vida que llevarás si te dedicas a escribir cosas literarias (…). Ya no te librarás jamás de pensar que tienes la obligación de pensar. Hazme caso, hija. Se empieza escribiendo, pero nunca se sabe dónde ser termina”.

“Sentado en una silla municipal, Georges deduce que un conjunto de aseveraciones, siempre que sean paradójicas y malévolas, forman el único sistema de pensamiento que domina el sistema de relaciones de las personas con las que convive”.

“Motmot, en consonancia con su atavío, puso el coche a la máxima velocidad prohibida”.

“Quizá sea una deformación profesional de asidua a los mercados, pero prefiero las boberías frescas a las genialidades en conserva.”


“Se encontraba en esa envidiable posición del escritor que, indiferente a la vida, lucha denodadamente por conseguir contarla sin permitir que la vida le contamine”.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Escribir es algo más que junta palabras para formar oraciones. A veces los columnistas lo hacen para cobrar. Hay que ser muy observador y decir las cosas de una manera que le lleguen a quien lo recibe. Escribir compromete si lo haces con honestidad. Escribir sobre el sexo de los ángeles es emborronar papel.