EL SINDICATO COMO EMPRESA

Una vez anochecido tomas con tu mujer unas sidras y en la mesa contigua oyes que un muy significado miembro de la Unión General de Trabajadores dice con gesto serio: “Tiene que dimitir, tiene que dimitir”.

No sabes quién tiene que dimitir, pero piensas en Rajoy: por los papeles de Bárcenas o porque está uno acostumbrado a que la oposición pida a las primeras de cambio la dimisión de cualquier gobierno establecido.

Antes de acostarte entras en la web de los dos periódicos regionales por si ocurrió algo a última hora, y en ambos lees que UGT y su Secretario Regional acaban de ser condenados por vulneración de los derechos fundamentales de un abogado del sindicato, a la vez miembro del comité de empresa. En este caso la empresa es la UGT. No se había filtrado noticia alguna de que estuviera pendiente esta sentencia. Se publica lo que se publica y se sabe lo que se sabe.

Te parece una noticia de portada, de una gravedad máxima por lo comprendes el gesto carioacontecido del sindicalista. Sin embargo, en la edición en papel del día siguiente solamente asoma en las páginas de economía y no en lugar destacado.

De acuerdo que un sindicato o la iglesia católica o una ONG son patronal respecto de sus trabajadores, pero no esperas que funcionen con la misma crueldad que denuncian cuando juegan en el campo contrario, en el campo que les es propio.

La sentencia es recurrible (en eso insiste siempre el perdedor) pero demoledora. Tuviste la paciencia de leer las cuarenta páginas y destacas lo siguiente:

- Que la implantación del sello EFQM los obligó a una reducción de costes (quién lo diría, el sindicato luciendo sellos de calidad).

- Que el sindicato, como empresa, propugnó el descuelgue salarial, una reducción de jornada para toda la plantilla, un ERE de cuatro años de vigencia, externalización de servicios, bajas incentivadas, la supresión de la carrera profesional, la supresión definitiva de determinados complementos y la temporal de otros.

- Que las cuentas son revisadas por auditores externos.

- Entre los motivos de crisis económica se habla de la caída de la calidad de la cuota, curioso giro.

- Como el presidente del gobierno o el de cualquier empresa, se refiere a la necesidad de sacrificio ante la difícil situación que obliga adoptar medidas necesarias para la supervivencia de la entidad.



http://canales.elcomercio.es/extras/documentos/sentencia-ugt.pdf



Juzgados y sentencias, el foro donde se quitan todas las máscaras, que ocultan la auténtica cara de perro de las personas y las instituciones.



Tiendes a clasificar como categoría lo que es una mera anécdota, pero la crisis socava y cuestiona todos los valores y nos acaba convirtiendo a todos en jugadores de rol, con papeles siempre intercambiables, adaptables a cada caso a base de talante, tolerancia y comprensión para acabar aceptando lo inaceptable.



El sindicato haciendo de patrono y la silla del sindicato vacía y vaciable.