LECTURA DE LA PRENSA. SITUACIÓN BÉLICA
Comienza uno con una tontería que se resolverá al final. ¿Cuál es el principal problema en las reuniones comunitarias? Mientras llega al final, cada uno que haga memoria.
Preocupante la situación bélica y lo que conlleva. Meten miedo solamente la lectura de los titulares de El País: “La guerra de Putin precipita un nuevo orden mundial. La creciente agresividad rusa desata una espiral de alcance imprevisible mientras se configura una revolución energética global: de las relaciones internacionales a los hábitos de vida. La creciente agresividad rusa y la decisión de Biden de plantarle cara ponen a Europa en riesgo de ser escenario de un choque fortuito o deliberado entre potencias nucleares. La UE trabaja a la carrera para romper su dependencia de Rusia tras la decisión del Kremlin de cortar esta semana el gas a Polonia y Bulgaria. China y la India se frotan las manos con la oportunidad de adquirir a precio más ventajoso la energía que Occidente ya no quiere y regímenes a autoritarios se ven en posición de fuerza frente a las democracias. Bruselas teme más cierres de gasoductos y se prepara para una posible ruptura total de relaciones energéticas con Rusia. El gas, un arma económica y de chantaje internacional". ABC también dedica algún artículo a reflejar la situación: ”Por qué los alemanes temen a Putin. Conscientes de su dependencia energética y del trauma que supone una guerra mundial, han acuñado la expresión 'Zeitensende' para definir el cambio de era que traerá la invasión. Polonia asume el liderazgo europeo contra el imperialismo ruso. Pesimismo alemán: el 40% de los alemanes han pospuesto ya compras o proyectos. Varsovia ha recuperado el trato de favor militar y diplomático por parte de la Administracion Biden y el viceprimer ministro polaco se ha mostrado dispuesto a albergar ojivas nucleares estadounidense”.
Por cierto, LNE entrevista a Cándido Méndez, de UGT, con motivo del Primero de Mayo y le preguntan - ¿Y en soberanía energética qué propone? – Hay que acelerar la transición energética y el despliegue de renovables. Sin embargo, creo que es un error cerrar las centrales nucleares”. La respuesta no mereció ocupar las letras grandes ni medianas de los titulares, pero habría que ver qué pensaba Méndez de la nuclear antes de todo esto de Ucrania. No es exactamente una crítica, porque hay hechos tan revolucionarios que obligan a replantear muchas posturas tradicionales y para quien tenga un poco de amor propio, duele reconocer el error y abandonar los postulados y las banderas a las que uno siempre se aferró.
El vaciamiento rural aparece varias veces en la prensa del día, por ejemplo, en las palabras del alcalde de Peñamellera Baja, José Manuel Fernández Díaz, del PP, que da este titular: “Se nos llena la boca de reto demográfico, pero no somos capaces ni de retener a un médico”. En la respuesta amplía un poco más: “Se nos llena la boca de reto demográfico, cuando no somos capaces ni de retener un cajero de las oficinas bancarias que se cierran ni suplir las plazas de Atención Primaria”. Eso en pequeñas capitales de pequeños concejos, pero ocurre en capitales de concejos más grandes como Cangas de Narcea o Tineo. A otra escala se reproduce en las llamadas provincias vaciadas, que son casi todas. Así, El Mundo se refiere a las miles de vacantes que no se cubren en Soria, Cuenca y Teruel. Estamos hablando de pequeñas capitales donde se puede vivir muy tranquila y dignamente. Uno cree que si te mentalizas y tienes unos años, te aclimatas a cualquier sitio, pero si tienes hijos adolescentes, a estos tienes que darles movilidad porque dirán que en Pola de Lena no hay nada, que hay que ir a Mieres; pero desde Mieres, que en Mieres no hay nada, que hay que ir a Oviedo o a Gijón; y que Gijón y Oviedo están muertos, que hay que ir a… Claro, todos por el bien de los niños y su futuro. Isabel Díaz Ayuso debe tener la solución porque esto dice en entrevista a LNE: “Nosotros estamos llevando población a muchos pueblos rurales muy pequeños en la comunidad de Madrid”. Valdrá más creelo que dir velo.
Cuando uno lee algo de los catedráticos de Bioquímica de la Universidad de Oviedo, hay que leer entre líneas. Acaba de fallecer Paz Suárez Rendueles, y el ex rector Vicente Gotor escribe esto: “En el Departamento de Bioquímica, del que fue directora, no pasó desapercibido su trabajo, ayudando a todos, especialmente a los jóvenes, sin crispación ni sectarismo, como era ella, muy objetiva en todas sus decisiones”. ¿Va con segundas? Los iniciados en estas guerras sabrán.
Con motivo del día de la madre, LNE dedica un reportaje a las no madres y a la vara que les dan con frecuencia quienes les preguntan que para cuándo, si están en edad, claro. Dice una interesada, y uno está de acuerdo: “Nadie está en el derecho de preguntar por estas cosas. En mi caso no tengo hijos o hija porque no quiero, pero si fuera por una enfermedad u otra razón y no pudiera tenerlos aunque quisiera, ¿alguien de los que preguntan es consciente del daño que está haciendo?”. Seguro que uno hizo alguna vez ese comentario, u otros. Un compañero, ya fallecido, que había cogido unos kilos los últimos años de su vida, le dijo a uno en una ocasión: “¿sabes cuánto jode que te digan que vaya barriga que echaste últimamente?”
A todo esto el Madrid campeón de liga y uno, madridista moderado, ilusa y tontamente contento, porque ¿cómo está uno contento si en la última alineación solamente hablan correctamente el castellano Lucas Vázquez, Isco, Ceballos o Asensio? Inexplicable
Un perro de raza pitbull mata a su dueño de 26 años en la provincia de Castellón. Ocurren estas desgracias con demasiada frecuencia. Los amigos de las razas peligrosas tendrán sus estadísticas y dirán que el número de perros es de equis y el de accidentes es inferior al registrado con caniches. Puede ser porque las estadísticas son de lo más afeitable. En cualquier caso, habría que ver qué porcentaje de muertos hace que la tenencia de estos perros peligrosos se convierta en intolerable. Queda un consuelo, que uno no desea de ninguna manera, pero es un consuelo: más vale que la víctima sea el dueño que persona ajena.
Finaliza uno con otros perros y la respuesta a la pregunta del principio, que es: los ladridos de perros. Es uno de los titulares de un reportaje de El País titulado “La odisea de alquilar piso con mascota”. Uno vivió en tres comunidades. Quizá tuvo suerte, pero no era el problema. Si no es ese, ¿cuál es el mayor problema? La siguiente pregunta es cómo se determina cuál es el mayor problema. Habría que acudir a datos de atestados policiales levantados con motivo de reuniones comunitarias; registros judiciales de discrepancias que llegan hasta ahí; muestreo de actas de reuniones. Puede que existan estudios al respecto porque parece que está todo investigado. ¿Prefiere uno vivir en un piso entre broncas por cualquier cosa o entre gente repulida y supereducada pero remisa a pagar la comunidad, eso sí, sin una mala palabra? Es decir, entre delincuentes de cuello azul o entre delincuentes de cuello blanco.
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LECTURA DE LA PRENSA. DISPARIDADES AUTONÓMICAS
La prensa ofrece diariamente materias en las que se refleja la disparidad de criterios entre las distintas autonomías a la hora de regular cuestiones similares. Por ejemplo, en El País lee uno que las autonomías fijan reglas distintas para pasar de curso. Destaca el periódico que Cataluña y la mayoría de las comunidades socialistas son las más laxas. En El País de ayer leía uno que España era un país abocado a tener siete cementerios radiactivos ya que la empresa pública de residuos nucleares no encuentra ninguna comunidad dispuesta a asumir en su territorio los desechos de todas las centrales. Se estima que el sobrecoste de no tener un solo almacén es de 2.125 millones de euros (en realidad esta noticia no refleja ninguna disparidad normativa, pero es consecuencia de la configuración del Estado de las Autonomías). En El ABC se publica un interesante reportaje sobre la pesca del salmón y la tendencia que hace peligrar la supervivencia de la especie de los ríos norteños. La normativa difiere en cada comunidad en cuanto al período de pesca y medidas de protección. Curiosamente en Estados Unidos están restringiendo las capturas en pro del mantenimiento de la especie. También por el ABC se informa uno de que los niños adoptados sufren una odisea para encontrar a sus padres biológicos y reclaman una ley estatal que obligue a todas las comunidades a seguir los mismos protocolos ante el caos actual en los procedimientos autonómicos. La viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático del Gobierno asturiano declara en LNE que Asturias no tiene prisa en asumir la competencia de los ríos, que hay que hacerlo con cabeza. Gestionar sí, pero si hay dinero. Lanza un aviso a los ayuntamientos, léase sobre todo el de Mieres, que es el que más se quejó: La competencia de los ríos es del Estado, pero los cauces urbanos corresponden a los ayuntamientos. Aunque se haga la transferencia de cuencas, los tramos urbanos seguirán siendo responsabilidad municipal: lo única que cambia es que la Comisaría de aguas sería autonómica.
De todas formas, uno mira con cierta misericordia estas discrepancias autonómicas porque la grúa funciona de una manera en Oviedo, de otra en Gijón, de otra en León; igual los sistemas municipales de recogida de la basura, cada uno de una madre; las bibliotecas locales; en fin, todas las competencias municipales o provinciales, donde haya diputaciones, pero parece que las discrepancias autonómicas le chirrían a uno más, porque tiende a ver un matiz de confrontación política, mientras que en otros ámbitos territoriales sólo ve una gestión más neutra. Puede haber una cierta predisposición en contra por el ruido de las polémicas autonómicas.
Uno se pregunta si Manuel Campo Vidal gira mucho a la derecha porque escribe cosas como estas en una columna titulada “Gobernar España debe ser bien amargo : Sánchez comparte gabinete con un partido como Podemos que pide la dimisión de su colega, la ministra de Defensa; solo él tiene apoyos parlamentarios como el de Esquerra Republicana, que falla más que una escopeta de feria; solo España tiene un Parlamento con 18 partidos representados (y los que vienen), por lo que las negociaciones son muy complejas; solo aquí hay fuerzas que están en el Estado para debilitarlo y escindirse; y solo en España hay una derecha que siempre creyó que el poder era suyo y que cualquier otro que lo alcance es un “okupa” a desalojar a cualquier precio”.
En El Mundo lee uno que el Tribunal Constitucional valora aplazar el debate sobre la sentencia del aborto para después del 19-J de las elecciones andaluzas, y que el Tribunal Supremo tampoco hará pública la sentencia de los ERE hasta pasada esa fecha. ¿Sin saber qué van a decidir los altos tribunales sobre una u otra materia, qué procede? Porque si se sabe en qué sentido van a resolver, habría partidos interesados en que se supiera ya o que se pospusiera para no perjudicar expectativas, pero si ni se sabe ni se sospecha, ¿qué? Uno sería partidario de que se publiquen las sentencias cuando toque, como cualquier otra sentencia; ahora bien, es de esperar de los jueces que no aceleren ni retrasen las sentencias en vista de que el pronunciamiento vaya a ser como solamente ellos saben. Al fin y al cabo, el 19-J son unas elecciones autonómicas más, incluso aunque se tratara de elecciones generales. Distinto sería si la convocatoria electoral fuera para un referéndum donde se votara por la monarquía o la república.
El ABC publica un gráfico sobre la pérdida paulatina de afiliados de los sindicatos mayoritarios. Habría que ver si esa pérdida va al vacío o a otros sindicatos minoritarios. Uno se inclina por lo primero. Un informe muy completo sobre el mismo asunto en este enlace aunque los datos son de hace tres años. Fuente CCOO, así nada sospechoso de propaganda antisindical.
El grupo médico Quirón anuncia su intención de instalarse en Gijón con un proyecto de 40 millones de euros y 30 empleos. Los sindicatos médicos y los colegios de médicos y de enfermería lo apoyan. Sin duda, otros colectivos mostrarán su rechazo. Cuando uno observa las partes positivas de la medicina privada o de las empresas privadas en general, tiende a preguntarse ¿por qué desde lo público no podemos hacerlo así? Pues por pitos o por flautas, algo no sale igual.
Se anuncia la próxima firma de un protocolo que compromete al Estado, al Principado y al Ayuntamiento de Gijón en la construcción de la futura estación intermodal. Son administraciones del mismo color, pero mañana el color puede ser otro. Uno pediría que el protocolo y los documentos subsiguientes lo dejen todo atado y bien atado y no den lugar a malentendidos y descuelgues posteriores. Y pleitos y demoras. Uno sabe que es pedir peras al olmo.
Javier Vidal, ex portavoz municipal de Ciudadanos de Castrillón, acaba de causar baja en la formación. Señala: no descarto volver a Cs con otra dirección regional que no destroce el partido. Vidal, 75 años, con paso por varias formaciones. Uno no dice que esté ahí para medrar a estas alturas, ¿pero tan difícil es dar un paso atrás, o al lado, que se dice ahora?
Cuando escribe Javier Marías, uno se calla. El ABC publicó un reportaje titulado ‘Crímenes con fecha de caducidad. Los investigadores piden que no prescriban los asesinatos ante los continuos avances de ADN y otras técnicas para resolver casos”. Por asociación de ideas, uno recupera unos párrafos del “Tomás Nevinson”, de Javier Marías, que no trata de los asesinatos de ETA pero están en el trasfondo de la trama: “Las leyes establecen la prescripción de los delitos y crímenes, con muy escasas salvedades ponen barreras a su castigo, y hay asesinos que se dedican a contar prácticamente los años los meses, las semanas y los días que les faltan para que la justicia ya no pueda alcanzarlos y se haga ‘tabula rasa’. Al cabo de veinte años, qué sé yo, lo que se hizo se borra y no existe más, y al asesino sólo se le pueden arreglar las cuentas desde fuera de la ley (…) ¿Hoy sí, pero mañana no? (…) Los jóvenes son justicieros, y Patricia, por su juventud, creía que nada debía prescribir jamás. Pero lo remoto ha prescito de hecho, se lo había intentado hacer ver. Nadie busca castigar lo acontecido hace uno o dos siglos o más, por atroz que fuera. Es un espanto real que poco a poco se convierte en abstracto, en histórico, en ficción. Lo revivimos ahí, en las ficciones, lo revivimos como si sucediera de nuevo, y además ante nuestros ojos en tiempo real. Pero la película y el libro se acaban, y al salir de la ensoñación nos horrorizamos y lamentamos que acaeciera ese espanto, que sufriera aquella gente pretérita que no está en el mundo, como tampoco quienes los torturaron o esclavizaron o pasaron a cuchillo sin compasión ni necesidad. No nos cabe hacer nada al respecto, más allá de suspirar. En cambio, lo que aún se recuerda, lo que se ha vivido en persona de cerca o de lejos, prescribe para la justicia, pero no para los que lo padecieron o contemplaron, y de ahí que la venganza todavía palpite en el mundo, por mucho que la prohíba la ley. Seguro que para los padres de niños de la casa-cuartel de Zaragoza y del Hipercor de Barcelona nada de aquello ha prescrito ni prescribirá, ni para la familia de Tomás y Valiente cuyo asesinato ocurrió hace año y medio, ni para la de Miguel Ángel Blanco, cuya cuenta acaba de empezar y proseguirá mientras viva cada uno de sus miembros. La justicia es capaz de nublar, de envolverlo todo en bruma a medida que el tiempo avanza, y cuando este expira, es capaz de tachar y anular, de decretar que lo que pasó es como si no hubiera pasado, o que ha cesado de pasar”. Javier Marías, un grande, no por estos párrafos en concreto, que son opinables, sino por su obra y por lo que suscita.
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