LECTURA DE LA PRENSA. LIGEREZAS
Ve uno que el ABC anuncia en su portada una amplia entrevista a Núñez Feijóo, que uno pasa por alto. La portada de El País anuncia también otra amplia entrevista a Pedro Sánchez. Uno, empachado de banderías, le dedica el mismo tiempo que a la entrevista del gallego.
Está fea la autocita, pero uno se remite a lo escrito el 3 de junio sobre las elecciones en Lena. Previsible. No hacía falta ser muy listo, solamente conocer un poco el percal. Supone uno que en esta legislatura acabará el castigo del Partido Popular al Partido Socialista. Con esta serán dos legislaturas y media enfadados. Es hora de amigarse.
Se queda uno con la foto de los nuevos ediles de Oviedo, posando en primer término los cuatro cabezas de listas que obtuvieron representación. No hubo rodillo fotográfico. Esperemos que no haya rodillo político, sin que se cuestione que el Partido Popular ganó las elecciones y está legitimado para llevar adelante su programa electoral.
De lo ocurrido en San Vicente de la Barquera no se enteró uno por la lectura de la prensa, sino por una página de Facebook, pero después buscó en la prensa. Los cinco ediles populares dieron la alcaldía a la candidata socialista, única edil que obtuvo representación de su partido, antes de dar la alcaldía con su abstención a una agrupación electoral. Merece la pena la lectura de la noticia. Uno suscribe íntegramente las declaraciones del portavoz popular: mejor pactar con un partido serio que con una agrupación electoral, que a saber quién está detrás. Seguramente no votaron convencidos sino en atención al mal menor, pero así funcionamos en general en la vida porque lo mejor es enemigo de lo bueno. https://cadenaser.com/.../alcaldesa-por-sorpresa-en-san.../
***
LECTURA DE LA PRENSA. TIQUISMIQUIS
Hoy está uno tiquismiquis comenzando por la portada de El Comercio, donde lee uno: “El Museo de los Premios podría ser para Oviedo lo que el Guggenheim a Bilbao”. ¿Se trata de una anáfora? ¿Un intento de anáfora? Las preposiciones ‘para’ y ‘a’ son intercambiables en ocasiones, ¿pero en este caso?
Sigue uno leyendo, también en El Comercio, y también en la portada esto, referente a la corporación ovetense: “La nueva corporación municipal, a la espera de definir los sueldos, las liberaciones y los asesores”. ¡Vaya! Cierto que son necesarios y que hay que acordar esa intendencia bien al principio, pero tiene mala venta.
Continúa uno con el periódico de Gijón, pero leyendo las informaciones de la capital: “La jira al Naranco, un símbolo de unidad de Oviedo”. Estaría bien consultar el significado de jira con jota para determinar si se jira a algún lugar, por muy extendida que está la expresión.
Tiquismiquis se pone Marta, una lectora que pide aspersores para las calles de Oviedo ante la ola de calor. Por pedir…
Tiquismiquis serán los electores que nieguen el voto por una mancha en una acera. A ellos se refiere el alcalde de San Martín del Rey Aurelio: “Una mancha en un acera puede estropear una excepcional gestión de cuatro años”.
Preocupado está uno al leer otro titular del El Comercio: el 42 por ciento de los franceses votan a la extrema derecha. Al llegar a la letra pequeña resulta que un 42% votó alguna vez en su vida a la extrema derecha. No es lo mismo.
Ahora pasar uno a la portada de El País: “El bloque PP-Vox se sitúa al borde la mayoría absoluta”. Uno, de momento, niega la mayor porque el PP y Vox no son un bloque. Otra cosa es que la suma de PP y Vox se sitúe al borde la mayoría absoluta. Sigue uno tiquismiquis con las palabras, pero no mete uno en el mismo saco las erratas, las inconsistencias y las aseveraciones torticeras.
Terminemos con distensión. ¿Ye sidreru el alcalde de Oviedo? Nun lo parez, al menos al juzgar por la foto en la que se le ve mirando al escanciador, Berto, concretamente, de El Ferroviario. Un sidreru suele fijarse más en cómo golpea el chorro el vaso, que en cómo sale el líquido de la botella. En cuanto a las miradas, Berto dirige la mirada al vaso, Canteli a la botella, dos comensales a Canteli, su mujer parece que al fotógrafo. No quiere uno ser cruel con la frase de la luna, el necio y el dedo.
Hablando de El Ferroviario, dispone de la más amplia carta de sidras que uno conoce, normales y con denominación. La tiene hasta sin alcohol, y a veces, uno comete ese pecado venial para evitar otras mortalidades o mortandades. Pecado sidrero y grande es vender sidra selección o sobre la madre, y no escanciarla. Valga la foto como escarnio pese a la afición que uno tuvo durante muchos años a la botella escanciada y al pinchu de picadillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario