2015/09/23

EL AÑO SABÁTICO

Hace tiempo un viejo amigo, en una de esos desgraciados encuentros fugaces, desgraciados por fugaces, te contó que iba a coger o que acababa de terminar un año sabático, no recuerdas bien el dato. Ignoras qué razón te dio entonces, pero como avalas a los que aprecias, te convencieron las razones, que tampoco sabes cuáles fueron. Eso mismo lo tildarías de boutade si te lo cuenta otro de neutros quereres.

Te acabas de enterar de que aquel año sabático en realidad lo dedicó a encaminar la educación del hijo que tenía con síndrome de Down. Hoy se puede demostrar que aquel paréntesis obtuvo un merecido resultado. Lo acabas de saber por variadas fuentes.


Inevitable estremecerte.

No hay comentarios: