Si tomas la huelga general como actitud mental, ¿qué plan se te ocurre para pasar el día? Primero te entra la duda de si levantarte de la cama o pasar en ella el día con las persianas abajo, sin desayunar o, como máximo, ingiriendo algo como servicio mínimo a modo de huelguista de hambrE con alimentación asistida.
Si, sin ser tan radical, te acabas levantando, ¿te afeitas? ¿te vistes? ¿haces la cama o te acuestas por la noche como Almatriste, métete por donde saliste?
Si sales a la calle que sea por otear el ambiente, por despejar la mente, por estirar las piernas, nada de cafelito ni periódico, que se supone que hay que parar del todo.
¿Oír la radio, ver la tele? Solamente los informativos para saber algo del seguimiento de la huelga.
¿Llamar por teléfono? Nada, ni a los amigos, ni a la madre, únicamente a los teléfonos de emergencias si fuera necesario. Hay que ser solidarios con los huelguistas y con quienes queriendo ir no puderon serlo.
Nada de Facebook, nada de dar el ME GUSTA ni ME DEJA DE GUSTAR. No hay internet, nada de ver fotos, que no se entere nadie que esquiroleaste a tu manera.
La verdad es que una huelga mental es lo más parecido a un nirvana. Van a ser las doce, ni tiempo hay de corregir esto, que salga como sea
5 comentarios:
De acuerdo, si se hace huelga hay que hacer ayuno y abstinencia. También tenían que joder la electricidad en nuestras casas y las comunicaciones y el transporte y las urgencias....Pero seguro que los que viven de las ventas a un público no piensan igual, aunque estén en contra de lo que hace el gobierno. Muchos del sector de hostelería han pasado su descanso semanal al día 14 para evitar la huelga y los piquetes 'informativos' en la era de la información. Hay piquetes coercitivos que quieren imponer su voluntad en días como hoy. Hay que pasarle la factura de los destrozos y perjuicios los piquetes y a los que los incitan.
Hay que quitarle todas las subvenciones a los sindicatos y y todo ese mangoneo que tienen en las empresas, que vivan de las cuotas de sus afiliados.
Hay muchos españoles por el mundo buscando trabajo, que han encontrado al final, pero no se van estos sindicalistas descontentos, que están viviendo con todas los privilegios de los políticos... porque son políticos y los descontentos siempre aprovechan estos conflictos para arrimar el ascua a su sardina. A quien no le gusta este régimen de libertades y le gustaba el de Zapatero, que nos ha metido en esta situación, que se vaya a Cuba, que allí todos son muy socialistas. Y luego tienen un coche de alta gama... un piso en zonas privativas... y un nivel de vida muy capitalista ¿De qué van?
Son noticia los desahucios que llevan al suicidio. Alguien escribió ésto en este blog el 12/14/2010 01:13:00 a.m.
'El precio por el que compró la casa ¿también lo puso el banco?¿o lo puso el vendedor?¿el comprador aceptó ese precio por el que compró la casa?¿o le obligó el banco a comprarla?¿el que la compró estaba pensando que la casa la iba a vender por el doble de lo que el pagó?¿o sólo la compró porque "le gustó"?el banco era conocedor de su situación económica ¿y él?¿era conocedor de su propia situación económica para tomar sus decisiones o sólo la conocía el banco?¿la decisión la toma él o el banco? ...........y así se me siguen ocurriendo preguntas sobre las cuales nunca se hará una tira cómica. (Cuanta demagogia hay en este país....)'
Ha sido un día espléndido para tomar la sidra con el picadillo, sentado en esa plazuela, tranquilamente. Ellos seguramente no viven de la subvención
pocas cosas son blancas o negras, pero...¿acaso el desahuciado no pena su responsabilidad con la pérdida del piso? ¿o acaso cuando el banco subaste o venda el piso recuperado enjuga la deuda del desahuciado?
El banco ¿cómo pena su responsabilidad? (recordemos el libre mercado donde el negocio implica beneficio o pérdida).....
El banco expulsa al hipotecado y luego permite que el piso lo llenen 'ocupas' que no pagan hipoteca, ni luz ni agua... Y al banco se le dan fondos para que los directivos se proporcionen retiros multimillonarios. Y el pobre cada vez más pobre. Y la huelga como lavatorio de nuestras conciencias para que al día siguiente todo siga igual. De color gris marengo.
Los políticos siguen con sus ipad, los sindicalistas con un que les corte en la sede el jamón de pata...
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