Cuéllar es el portero titular del Sporting. En el último partido disputado en La Coruña, al apearse del autobús, dirigió una mirada fija al los seguidores del Dépor que estaban gritando o hablando alto (omitamos la posibilidad de que estuvieran 'increpando') hacia la plantilla del Sporting, su equipo técnico y otros acompañantes. Según Cuéllar, como posteriormente se pudo confirmar, la mirada se dirigió en concreto a una zona donde un seguidor del Dépor estaba sufriendo un ataque epiléptico, que de hecho fue inmediatamente atendido por los sanitarios del equipo forastero.
https://www.youtube.com/watch?v=Pa1HJmL2XKc
Llámalo rapidez, inmediatez, prisas, llámalo equis, pero el autor del reportaje, sin contrastar nada, mandó el vídeo a La Nueva España, que lo colgó inmediatamente en la edición digital señalando que Cuéllar se había encarado con la afición gallega. Posteriormente la retiraron pero no encontraste ni rectificación ni disculpas.
Los medios clásicos, corporativamente, ocultaron la información en un primer momento, hasta que en una posterior rueda de prensa el portero puso los puntos sobre las íes de la forma que se puede ver en el vídeo, pongamos que destemplada.
Al portero le queda poco tiempo de sportinguista, de manera que el Sporting se puso de lado de la prensa: están llamados a un matrimonio de mayor duración y se van a necesitar más mutuamente.
La prensa escrita reivindica su espacio frente a las redes alegando profesionalidad, veracidad, comprobación de las fuentes, capacidad de análisis, por contraposición a lo que se cuelga en las redes: cada uno lo que le da la gana, falta de rigor, noticias sin contrastar, amontonamiento de datos sin criterio. Los medios clásicos siguen siendo tu principal fuente informativa pero te acercas a ellos con una cierta reticencia. Publican las noticias que publican, muchas veces salidas de los gabinetes de prensa de empresas o instituciones, muchas veces con un inexistente procesado. El periódico y el periodista cometieron el mismo pecado del que acusan a las redes. Su fiabilidad y su audiencia sigue siendo superiores, de ahí la reacción airada del Cuéllar. Lamentablemente se necesitan salidas de tono para llamar la atención. Si en la rueda de prensa se hubiera mostrado comedido no merecería ni una línea en la prensa deportiva, ni un minuto en la radio del ramo.
Esa destemplanza te pareció bien para tapar la autocomplacencia de la prensa seria. No son los únicos proveedores o transmisores de noticias. Si quieren seguir siendo los líderes, tendrán que trabajar la profesionalidad que dicen ostentar.
1 comentario:
La venta de noticias es un negocio y si crea polémica, más beneficios reporta. Hay gente que ve Gran Hermano y saben todos los cotilleos de cada uno de los confinados en esa casa de... A otros les interesa el fútbol y los cotilleos no son deporte, pero son el deporte nacional. Y entre la Belén esteban defendiendo cualquier cosa y estas declaraciones del futbolista no veo grandes diferencias, dos personajes mediáticos con con su trabajo generan más en publicidad de lo que yo ganaré toda mi vida trabajando
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