DE FACEBOOK (Días 11, 12 y 13)

LECTURA DE LA PRENSA. LA ESPADA

Aprovechando que cuelga hoy uno aquí el sondeo casero del uso de las mascarillas, se fijó de una manera especial en qué seguía la prensa diciendo del virus. En La Nueva España coinciden dos artículos de opinión, uno de Antonio Papell y otro el billete de Pedro de Silva. Ambos en la misma línea para indicar que parece que el virus no existe, pero ahí está y con alguna consecuencia negativa.

La única noticia propiamente dicha la encontró uno en La Razón, para indicar que la séptima ola del covid deja más de cuatro mil muertes desde junio y que, aunque en mayores de sesenta cayeron los contagios, la mayor parte de las nuevas infecciones son en este grupo. Recuerda igualmente que el nivel de ocupación hospitalario debido al covid, permanece estable, cercano al cinco por ciento.

El Principado vuelve a implantar el teletrabajo para ahorrar. Visto el asunto globalmente, uno cree que el Principado ahorrará algo, pero si el funcionario trabaja desde casa, el gasto se traslada a las economías domésticas. ¿En conjunto se ahorra algo o se gasta más? Uno no ve tan matemático el ahorro. Salvo que la planta cierre por completo y teletrabajen todos, mientras en muchas dependencias permanezca algún operario trabajando, la luz, la calefacción o el aire estarán puestos para todos, y el ahorro será inexistente. La automatización del cierre de puertas, de momento traerá el gasto de su inversión, además del goteo del coste periódico de mantenimiento: otro artilugio susceptible de averiarse. No se trata de oponerse a cualquier cambio, pero uno no ve tanto ahorro. En cuanto a lo de utilizar más las escaleras, a ver lo que opina el departamento de prevención de riesgos: mejor salud cardiovascular, pero más riesgos de roturas y esguinces.

¿Alguien recordará dentro de un mes si el rey Felipe se levantó o permaneció sentado al paso de la espada de Simón Bolívar en la toma de posesión de Gustavo Petro como nuevo presidente de Colombia? Uno echó una ojeada a varios periódicos y en todos, absolutamente en todos, se recoge no solo el hecho, sino las declaraciones a favor o en contra. Incluso el editorial de El Mundo se pronuncia en estos términos: “Hizo bien el rey en no honrar un símbolo que causa profunda división…”. Dijo uno que en todos, pero en todos no, porque La Vanguardia aporta foto y noticia del rey de pie al paso de la espada. Si realmente fue así, es inconcebible el revuelo levantado por oposición, gobierno, oposición dentro del gobierno y opinadores variopintos. Lluis Foix, columnista habitual de La Vanguardia da este título a su columna: “Los hechos, la memoria y el relato”. No está hablando de la espada, pero el título parece clavado para dar respuesta a la pregunta inicial: ¿con qué relato nos quedaremos dentro de un mes, con el de que el rey se levantó o que permaneció sentado?

Las altas temperatura propiciaron la aparición de noticias meteorológicas en los medios que uno ojeó, disculpa que le sirve para contar una anécdota. Hoy tomó uno una consumición en una terraza prácticamente vacía por el calor reinante, porque un toldo impide la acción directa de los rayos del sol, pero no el calor sofocante. Podía dar la impresión de que las meses estaban dispuestas para comer, pero no era el caso. No obstante, una clienta, antes de sentarse le preguntó a uno si se podía tomar algo allí sin necesariamente comer. Uno le aclaró que precisamente es lo que estaba haciendo. No prestó más atención a la clienta, que tomó una caña, que no tardó demasiado tiempo en agotar. Antes de levantarse, cogió una servilleta y limpió el borde del vaso, por la zona que había estado en contacto con sus labios (aparentemente sin pintar o con pintura discreta) realizando una limpieza a fondo durante unos veinte segundos. Acto seguido se levantó y se fue. A persona tan educada no le augura uno un futuro triunfador. Así no se llega a ninguna parte.

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LECTURA DE LA PRENSA. VOY A CONTARLES UN CORRIDO MUY MENTADO.

¿El calor le dejó aplanado a uno? Es posible porque hoy encontró uno muy poca cosa que destacar. Tan poco que se puede indicar de corrido, sin puntos y aparte. Ortega Smith, el de Vox, acusa a Sánchez de forrarse con los impuestos a la energía. ¿Él personalmente? Resignación y dudas por los aires acondicionados de los establecimientos. Como en materia de climatización no solía haber acuerdo, a lo mejor la imposición de la temperatura acaba con las disputas. Bienvenido sea el dedazo. Dice Borrell que todas las guerras acaban con una negociación. Que cuanto antes llegue, mejor. Realismo. Ojalá. Murió la escritora Gómez Ojea. Muy habitual en la prensa regional. Sin embargo, uno nunca pudo terminar ninguno de sus artículos. No les veía cosa. Vaya por Dios. Le hizo a uno gracia la viñeta del ABC. Es un chiste, no hay que buscarle más pies al gato.

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LECTURA DE LA PRENSA. HAMBRE Y SED

Hay días en los que está uno predispuesto para no encontrar nada reseñable en la prensa regional. Hoy fue uno de ellos, ni siquiera en esas hojas parroquiales en las que uno se fija de vez en cuando. De la gran prensa, tampoco es que uno haya dado con ningún gran descubrimiento, pero algo hubo, siquiera sea traído por los pelos. Véase si no.

Hace un montón de años, soltero todavía en La Pola, estaba escuchando Hora 25 en la cama cuando la voz de Martín Ferrand se toma un respiro para dar entrada a un corte publicitario que inserta una cuña de Ponche Caballero, que de aquella estaba de moda el ponchelo o ponche con hielo. El anuncio fue tan sugestivo, o uno estaba tan ansioso, que se levantó de la cama, abrió la puerta del mueble bar (entonces existían esas cosas) y se pegó un lingotazo en seco, volviendo para el catre más contento que un ocho. Hoy sin embargo, lee uno en el ABC estas declaraciones de Víctor Wilhelmi, director de una clínica dietética: “Cuando no comes estás lúcido y se te agudizan los sentidos”. Pues, dilecto Víctor, en el caso de uno, naranjas de la China. Como uno tenga hambre o quizás ganas de comer -para el supuesto de que no sean lo mismo- es incapaz de hacer nada, ni siquiera de esbozar estas líneas. Palabrita del Niño Jesús. Fue leer estas palabras de Mr. Wilhelmi y entrarla a uno un deseo irrefrenable de prepararse un café soluble y comer las tres últimas galletas de la caja, porque cuando quedan tres o cuatro galletas está uno loco por reciclar el envase. Una vez dada cuenta de las galletas y del café, ya está en condiciones de escribir estas líneas. No es que sean fuente de gran inspiración, pero ayudan a organizar las ideas y los párrafos.

En El ABC encuentra uno un artículo del notario Victorio Magariños Blanco. Se titula “De herencias y libertad” y cuestiona el sistema de herencias forzosas de nuestro Código Civil. Para él el testador debería disponer de un margen de libertad mayor. Es sabido que el sistema español básicamente dispone que dos terceras partes de la herencia se distribuyan necesariamente entre hijos y descendientes en proporción y matices que harían demasiado larga esta entrada si se describieran. La otra tercera parte es de libre disposición, es decir, el testador puede legarla a quien quiera, sea o no descendiente. Cuando se demuestra que hubo un trato más que inadecuado, el progenitor puede desheredar a los suyos, y esto también requeriría prolijas explicaciones. Algunos postulan, siguiendo a Proudon, que la propiedad es un robo y que, en consecuencia, no debería haber transmisión de la propiedad de padres a hijos. Uno no lo comparte. A uno le parece que las estipulaciones de la ley se basan en la voluntad presunta de los padres, que, en su mayoría, desean que sus bienes pasen a los hijos.

Hoy la mayor parte de los medios de comunicación dedicaron un tiempo al suicidio, como pudo uno comprobar en directo mientras tomaba una jarrina de ribeiro en El Reúndu, con alguna de sus generosas tapas de cortesía. Más tarde leería la entrevista a Martínez-Alés, Psiquiatra en la Universidad de Harvard, que declara esto, A: Menos del 10% de quienes lo intentan, repiten. B: Más del 90%de quienes lo intentan, no lo repiten. Es muy parecido. ¿Con qué titular nos quedamos?

Uno es muy poco cinéfilo. Por ejemplo había oído hablar cientos de veces (hay que exagerar un poco) del cruce de piernas de Sharon Stone en ‘Instinto básico’, pero estaba en la idea de que el cruce de piernas eran las piernas cruzadas, el resultado, no el cruce ‘in fieri’, como explícitamente reproduce El Mundo en imágenes nunca vistas por uno, que se abstiene de colgar en esta página tan pacata.

Siguiendo con una frivolidad de otro género, uno está con la viñeta de El Mundo. Uno sabe que un establecimiento de hostelería no se puede arreglar con los hielos caseros, pero estos días oyó a consumidores poner el grito en el cielo por el precio y el racionamiento del hielo en los supermercados. ¿Desconocen las cubiteras? A veces queda uno pasmado de a dónde hemos llegado.

Interesante editorial de El País echando un capote a Picasso tratando de desligar su categoría artística de las miserias humanas que se derivan de su trato con algunas mujeres. Sirve como advertencia para tolerar a los Picassos y a cuantos se sitúen a lo largo de la historia y de la política en las antípodas de Picasso.