RAZÓN Y PASIÓN; DESCARTES Y FLECHAZOS

Perdimos/ganamos que Madrid no fuera designada sede de las Olimpiadas del año 2020.

Desde el año de tu nacimiento, estos fueron los países que acogieron los juegos: Méjico, Alemania, Canadá, Unión Soviética, Estados Unidos, Corea del Sur, España, Estados Unidos, Australia, Grecia, China, Reino Unido. Según el Banco Mundial, esta es la clasificación de los países según el PIB de 2013: Estados Unidos, China, Japón, Alemania, Francia, Reino Unido, Brasil, Rusia, Italia, India, Canadá, Australia, España, Méjico y Corea del Sur. Parece intuirse una cierta relación entre PIB y capacidad de organización/despilfarro, según valoración de cada uno. Es cierto que Francia no organizó Juegos Olímpicos en los últimos cincuenta años, pero no vamos a dar la razón a los gabachos.

No era ese el motivo de esta entrada, que también, sino meditar sobre la fórmula de elección por descartes. Es un método habitual en concursos o elecciones. Por ejemplo en alguna de las deliberaciones en las que participaste como jurado en el concurso de cuentos Lena. Primeramente se votan unos descartes y, eliminados unos cuantos, se distingue al ganador. En anteriores designaciones para los juegos Olímpicos Madrid pasó el primer corte en primera posición. Hubo motivos para echar las campanas al vuelo pero acabamos plegando velas.

En una votación directa quizá prima la pasión y en la segunda fase se manejan argumentos más racionales. Piensas si ese sistema sirve también para elecciones personales o individuales ¿cómo es el esquema mental ante cualquier decisión? ¿vale para elegir una novia (si remotamente uno hubiera podido elegir entre un ramillete y estuviera indeciso), un libro, unas vacaciones, un coche?

Si uno decide directamente una opción, quizá el sujeto/objeto elegido es diferente de si se van descartando, mejor en días sucesivos. Quizá si tengo que elegir entre A, B, C, D y E, en primera votación elija la opción C, pero si voy descartando, a lo mejor el primer día descarto a B, otro día desecho a D, otro a E, y cuando me queden C y A a lo mejor en ese momento opto por A y no por la C que habría escogido a ojos cerrados. El mecanismo de elección grupal piensas que puede obedecer a los mismos esquemas, además de la capacidad de convicción de los miembros del jurado, pero seguramente juegan su papel la tensión razón/pasión, descarte/flechazo.